El Sevilla se hizo con la victoria en los minutos finales de un partido trepidante, donde ambos tuvieron opciones de ganar y de donde el Sevilla sale con un saldo negativo para el derbi, con la baja de Navarro y la más que probable de Fazio, quien acabó lesionado.
No se escondió el partido ni un instante. Sevilla y Athletic impusieron un ritmo frenético desde el primer minuto, situando la presión muy alta en campo rival. Y la primera ocasión se transformó en gol cuando Negredo cabeceó a gol una medida falta sacada por Rakitic ante la impotencia de Iraizoz.
El tanto no cambió el carácter ultraofensivo del partido. Pero el Sevilla salía más favorecido del toma y daca, con mucha más facilidad para superar la presión del conjunto rojiblanco, que mucho más precipitado apenas aprovechaba los resquicios que dejaba su rival cuando no finalizaba jugada. Producto de este dominio nacieron varias ocasiones en las que el Sevilla no tuvo acierto para ampliar distancia
La serenidad de Rakitic para colocar el balón en los espacios abiertos dominó la primera parte sirviendo a Negredo en varias ocasiones. En el ala contraria, a falta de la pausa de un necesario cerebro, los ataques vizcaínos adolecían de un patrón al margen de la velocidad de sus combinaciones, cuyas imprecisiones siempre propiciaron peligrosos contragolpes sevillistas.
Botía sustituyó a un desaparecido Manu del Moral al inicio de una segunda parte, que nació con el mismo guión, aunque de nuevo el mayor peligro llegaba a través del balón parado, al menos en los minutos iniciales. A punto estuvo Coke de anotar el segundo cuando envió al palo su remate a pase de Medel, quien recogió el balón tras el rechace de una esquinada falta de Reyes.
Fue el Athletic el que golpeó, de nuevo a balón parado. Fue cuando Gurpegui peinó una falta cerrada de Ibai Gómez. El gol serenó a los pupilos de Bielsa, quien comenzó a dominar el encuentro con un Ander Herrera mucho más protagonista. Sin embargo, seguían sin encontrar el último pase para regocijo de la parroquia sevillista, quien extendió su peligro a través de los contragolpes.
Pero faltó el remate de Negredo, que erró su remate en dos ocasiones continuadas y el partido seguía en peligro. Más pareció complicarse con la lesión de Fazio, lo que supuso el regreso de Perotti, y sobre todo, por la expulsión de Fernando Navarro, tras sacar el codo levemente en un salto castigado con una dudosa segunda amarilla.
No obstante, un inexperto Athletic equilibró balanza cuando en apenas dos minutos Laporte fue expulsado al recibir dos amarillas, la última de ellas tras una gran acción de Reyes, quien cuajó un gran encuentro. Fue el preludio del último esfuerzo sevillista, en el que espoleado por los ánimos de su afición, se impondría gracias a su mayor determinación arriba, la que pusó Negredo al rematar a placer un centro raso de Reyes desde la derecha.
De nada sirvieron las intentonas desesperadas de un Athletic a quien le faltó fútbol en las áreas y entregó el partido a un Sevilla que llegará con moral al derbi y con energías para creer en Europa. No obstante, la baja de Fernando Navarro y la probable de Fazio, con escaso margen para la recuperación, pondrá en aprietos en Emery, con pocos efectivos de su confianza en su defensa para medirse a un Betis en un partido que medirá los objetivos de ambos clubes en la recta final.
Sevilla F.C.: Beto; Coke (Cicinho 80’), Fazio (Perotti 65’), Fernando Navarro, Alberto Moreno; Medel, Kondogbia, Rakitic; Reyes, Manu del Moral (Botía 45’) y Negredo.
Athletic de Bilbao: Iraizoz; Iraola (Ramalho 69’), Ekiza, Gurpegi, Laporte; De Marcos, Iturraspe (San José 45’), Ander; Ibai Gómez, Muniain y Llorente (Aduriz 45’).
Árbitro: Mateu Lahoz, valenciano. Expulsó por doble amarilla al sevillista Fernando Navarro (72’) y al bilbaíno Laporte (79’). Amonestó a los locales Fazio y Perotti; y a los visitantes Gurpegi, Ander Herrera, De Marcos y Aduriz.
Goles: 1-0 (4’) Negredo; 1-1 (55’) Gurpegi; 2-1 (87’) Negredo.