Tras caer en Mallorca, mantener la fiabilidad en casa se antoja imprescindible para un Sevilla que todavía sueña con que el sprint final le permita jugar en Europa la próxima campaña.
Por ello, Unai Emery sabe de la importancia del duelo ante el Zaragoza para que el objetivo de la temporada no se convierta en una quimera: “En casa nos estamos mostrando fuertes, pero cada partido es una oportunidad de ganar crédito en la continuidad. Fuera de casa debemos romper esos números tan negativos que nos están lastrando en la clasificación. El partido del domingo vuelve a ser un partido de la credibilidad, de sumar tres puntos que son aire total para nosotros”.
Como experto en la motivación de grupo, Emery sabe que no puede dejar ni un resquicio para la relajación de su equipo que debe pensar en ganar “once de once” partidos. Para ello vuelve a incidir en la confianza, un aspecto de vital importancia tanto dentro como fuera de la plantilla, desde donde deben tomar al Sevilla como un equipo a tener en cuenta en la recta final.
“El objetivo es seguir siendo creíbles en el juego en casa, sumar los tres puntos y el cómo sumarlos, mantener la idea de juego”. Lo tiene claro Emery, quien sabe que la mejor receta para progresar en Liga es que la eficacia casera acabe trasladándose a los desplazamientos convirtiendo el sueño europeo en una proeza alcanzable.