Se marchó sin premio el Sevilla FC, una temporada más, del Santiago Bernabéu, pero con una sensación tremendamente distinta a las últimas recordadas. Merecieron los nervionenses haber obligado, como poco, a remontar a los blancos, después de un gol anulado a De Jong por el colegiado por presunta infracción en la primera mitad. Tras el primer tanto de Casemiro, los de Lopetegui se repusieron y el doblete del brasileño acabó por dejar el casillero vació, pese a dar una imagen muy seria y de equipo sólido en la capital de España.

Los primeros veinte minutos de partido transcurrieron con muchísimo ritmo por parte de ambos equipos, que circulaban muy rápidamente el esférico de un lado a otro del campo y trataban de hacer largas las posesiones cuando el balón estaba en sus dominios. Pese a ello, el primer lanzamiento a portería en el choque no llegaría hasta casi el ecuador, a cargo de Kroos y sin ningún tipo de inconveniente para Vaclík. El Sevilla, habitual en su juego, se desplegaba por bandas con Jesús Navas y Reguilón tratando de pisar línea de fondo y centrar en busca de remate.

El remate certero llegó, a la salida de un córner botado por Banega, de la cabeza de Luuk de Jong, que ajustaba a la perfección el pase del argentino a la escuadra derecha de Courtois. Sin embargo, el colegiado Martínez Munuera, tras ser requerido por el VAR para acudir a revisar la acción, terminó por anular el gol del holandés por una supuesta falta previa de Gudelj a Militao, que caía al encontrarse con el serbio, completamente quieto, en su trayectoria al tratar de perseguir a De Jong. Sin nada más destacable se retiraban a los vestuarios los dos conjuntos.

La segunda parte arrancó con la misma intensidad con la que se puso en marcha el partido en sus inicios, con ambos equipos disputándose el control del terreno de juego. Un error defensivo en la salida de balón permitió al Real Madrid, en prácticamente su primer disparo, abrir el luminoso de la mano de Casemiro, que superaba a Vaclík en su salida. Pero, pese al varapalo sufrido y el tanto anulado que todavía coleaba en las mentes, el Sevilla FC se repuso en el Bernabéu y, nuevamente, con un tremendo pelotazo con la zurda, De Jong volvía a establecer las tablas con todo merecimiento para el holandés y los blanquirrojos, de negro entero hoy en Madrid.

Con la alegría de haber retomado la senda marcada y con la sensación de poder hacer aún más daño a los blancos, llegaría el doblete de Casemiro. Un centro desde la derecha de Carvajal lo cabeceaba en solitario el brasileño, que volvía a adelantar a los suyos y colocando el marcador que sería definitivo. Pese a ello, pudo acabar el partido de forma distinta. Primero con un centro raso de Jesús Navas que Militao desviaba en última instancia y después con una acción individual de En-Nesyri, cuyo disparo se iba algo alejado de Courtois. También Vaclík realizó una buena intervención en un chut de Kroos dentro del área pequeña.