Con dos equipos como mínimo por categoría inferior, resulta raro que Cajasol no haya aprovechado más los suministros caseros. Desde la temporada 1999/2000 un total de 30 jugadores formados en la cantera o fichados para ella, han formado parte del equipo de ACB. De esa treintena de jugadores pocos fueron capital en la plantilla. ¿Llegan poco formados para lo que se espera de ellos? ¿Poca paciencia con ellos?

José Luis Sosa. La década empezó con Pedro Fernández como único jugador canterano. En cuanto a número de jugadores de cantera, es una de las peores temporadas. Como contrapunto, el murciano ha sido de los canteranos que más minutos ha disputado en ACB.

Una temporada más tarde el CB Sevilla dobla el número de canteranos en plantilla. Sergio Sánchez y Manolo De la Casa acuden a varios partidos y entrenamientos del equipo senior. Sin embargo su presencia será testimonial, a pesar de durar varias temporadas más en la disciplina.

Siguiendo con la tónica de la temporada anterior, el curso de 2001/2002, se presenta con el doble de jugadores formados en la huerta cajista: Sergio Sánchez, Víctor Pérez –hermano de Raúl Pérez-, Juan Torres y Manolo De la Casa.

Con Gustavo Aranzana en el banquillo la cantera florece. Vuelve a doblarse el número de canteranos. De 4 a 9 jugadores: Eric Sánchez, Sergio Sánchez, Manolo Valdivieso, Víctor Pérez, Juan Torres, Manolo De la Casa y Antonio Bustamante. Por si fuera poco Carlos Cherry y Raúl Pérez, ambos sevillanos y salidos de la cantera cajista, vuelven a Sevilla tras un periplo fuera de casa.

Tras esta explosión de canteranos, se vuelve a contar sólo con cuatro jugadores en la temporada siguiente. Muchos terminan su periplo en Sevilla, y otros salen cedidos buscando minutos. El número aumenta una vez más si contamos con Carlos Cherry y Raúl Pérez.

El número de canteranos sigue fluctuando un año más tarde. Vuelve a aumentar, pero siguen teniendo el protagonismo cero de temporadas anteriores. Sólo Cherry y Raúl Pérez juegan con asiduidad y son piezas importantes en la plantilla.

La cantidad de canteranos vuelve a bajar, esta vez drásticamente. Siguen contando con minutos Cherry y Raúl Pérez, aunque este último cada vez menos debido a su edad. Además de ellos, Josep Mestres y Mario Plata es otro par de canteranos nuevos.

La temporada 2006/2007 empieza con Cherry buscando una salida debido a que no se cuenta con él a pesar de sus grandes actuaciones defendiendo a la escuadra sevillana y termina con Marcos Suka-Umu y Antonio Bustamante apareciendo asiduamente cuando Moncho López se sienta en el banquillo.

A la temporada siguiente sólo Bustamante seguirá. Sin embargo, no la termina. Se confiaba en él como segundo base, aunque la directiva de Cajasol se guardó las espaldas fichando a Tyronne Ellis y a Andrés Miso por si Bustamante no rendía. Y así fue. No tuvo minutos y no pudo rendir.

Tras Bustamante aparece otro base: Juan Alberto Aguilar que jugó varios partidos y a la temporada siguiente se fue a Galicia a buscar minutos allí. Junto a él, Joaquín Bonhome también se enfunda la casaca hispalense.

Desde la 2009/2010, Satoransky y Sastre son los nuevos canteranos. Quizás la correcta definición sería la de jugadores fichados para la cantera. Y en la temporada actual ambos siguen en la plantilla, además del debut de Ricardo Pámpano. El base sevillano es la nueva esperanza de la parroquia sevillana.

¿Pero por qué fracasan? ¿El método correcto de formación? ¿Una competición de baloncesto base con agujeros por muchos sitios? ¿Poca paciencia con los jóvenes? ¿Demasiados cambios de proyectos? Quizás es un poco de todo y un mucho de nada. Una mezcla de factores que impide que Cajasol pueda contar con canteranos.

www.SevillaActualidad.com