Si el Betis quiere estar en primera división la próxima temporada, y no va mal encaminado, se debe dedicar a sumar los puntos necesarios para estar al final de la temporada entre los dos primeros clasificados, si es como líder mejor. Las bajas de los rivales no deben importar; ser merecedores del ascenso significa ganar los partidos por ser mejores que el resto de equipos, independientemente de otras circunstancias.

Pero como una ayudita nunca viene mal, se agradecen las bajas que los rivales puedan sufrir cuando se enfrenten al Betis. Este es el caso de nuestro próximo rival, el F.C. Cartagena. El míster del conjunto cartagenero, Juan Ignacio Martínez Jiménez, no podrá contar para el partido de hoy con dos de sus mejores atacantes, Toché, lesionado, y Botelho, que vio la roja directa durante el partido ante el Recreativo de Hueva del pasado sábado. Los defensas Cygan y Cala están tocados pero podrían recuperarse a tiempo para disputar el encuentro.

Cambiando de tema, si se decía que quedan por delante nueve jornadas, veintisiete puntos, mejor que nos vayamos olvidando de los de Barcelona. Se hicieron públicas las designaciones arbitrales para la jornada treinta y cinco de liga y nos ha tocado el premio gordo. Pino Zamorano será el encargado de dirigir el partido que el Betis disputará en dicha jornada frente al Barcelona B. Buen equipo rival y árbitro muy malo, una combinación explosiva que los de Pepe Mel intentarán superar para sumar los tres puntos en juego. Como he dicho antes, hay que ser mejores que el resto de equipos y ganar los partidos para ser merecedores del ascenso, pero si nos toca un árbitro horrible que no entiendo cómo sigue arbitrando en el fútbol profesional, la cosa se complica. Aún se recuerdan por estos lares sus lamentables actuaciones en el Camp Nou, donde el Betis ganaba 1-3 a falta de pocos minutos y nos la lió con penaltis inexistentes, expulsiones inventadas y alargando el partido hasta que el Barcelona empató, o la pasada temporada en el Villamarín ante el Cartagena, donde volvió a expulsar a dos béticos y le faltó rematar un saque de esquina botado por los cartageneros para redondear una de las actuaciones más esperpénticas que recuerdo. Los árbitros son malos en general, pero este se lleva la palma.

En fin, el campeonato no para y el próximo objetivo no es otro que sumar los tres puntos que habrá en juego hoy en el Benito Villamarín. Isidoro y Belenguer regresan tras sus respectivas sanciones, mientras que serán baja por lesión, además de los de larga duración Odonkor y Miki Roqué, Fernando Vega, operado ayer por la mañana y para el que la temporada ha terminado, y Jonathan Pereira, expulsado en Jerez.

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