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El Murcia, rival esta tarde en la Nueva Condomina, se encuentra en lo más bajo d ela clasificación, a pesar de haber cambiado ya de entrenador. Antonio Tapia podrá contar para el partido con las dudas de Iriney, Melli y Arzu. La afición murciana protestarrá por la mala situación del club.

Ángel Espínola. El Real Betis se enfrenta esta tarde al Murcia, con la intención de continuar su racha de dos victorias en los últimos partidos. Victorias que son la única arma con la que se puede olvidar el desastre institucional que vive el club internamente. El equipo de Antonio Tapia ya está en la ciudad pimentonera tras una semana apacible.

De lograr una tercera victoria, el Betis podría encaramarse en los puestos altos de la clasificación, demostrando que es un equipo de Primera. Sin embargo, una derrota volvería a traer los fantasmas  de hace una semana en la que miles de aficionados esperaron a las puertas del Ruiz de Lopera a que pasaran veinte minutos de partido para entrar al campo.

Antonio Tapia podrá llevar hasta la Nueva Condomina a los tocados Iriney, Arzu y Melli. Si bien, la enfermería de Sevilla sigue contando  con Capi y Casto, ambos con roturas fibrilares en el abductor de su pierna derecha. El catalán Sergio García también estará en el terreno de juego, luchando por anotar algún tanto que lo eleve en la tabla de los máximos goleadores del torneo.

El Murcia, por su parte, también vive un mal momento deportivo. Situados en el fondo de la clasificación, los hombres de José González llevan cuatro jornadas consecutivas sumando derrotas y sólo una victoria ante el Betis podría darle un halo de esperanza al equipo pimentonero.

Sobre el planteamiento del choque, González afirma que «trataremos de frenarles y mostrar nuestras virtudes, que también tenemos, agregando que el rival «es vulnerables en su área, pero no porque tenga malos futbolistas en defensa, sino por las propias características del equipo».

El técnico del Murcia no podrá contar para esta tarde con el joven Daniel Aquino, lesionado de gravedad. Si bien, volverá al once Mario Rosas, que se sumará a jugadores como Pereyra y el ex madridista Mejía, en el once titular de los pimentoneros.

La afición bética, más calmada con el alivio de las victorias, tiene su símil en la afición visitante. Ya que la afición del Murcia ha decidido organizar diversos actos en señal de protesta, y a su vez suspender uno de hermandad que estaba previsto, como consecuencia de la actual situación que vive el club.

Partido fácil por tanto a priori para los heliopolitanos, una ocasión inmejorable para subir un escalón más en la tabla y en la esperezan de la afición. Una derrota, eso sí, volvería a sacar a la luz el pésimo estado institucional que vive el Betis desde hace años.

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