Dos goles, uno de ellos en propia meta, una expulsión y penalti fallado condenan al Betis. Tras los resultados de la jornada, el partido ante CA Osasuna aumentaba en importancia y no entraba el Real Betis bien al partido.
Minuto uno y Roberto Torres adelantaba a su equipo en un centro que le llegaba desde el lado derecho. Primer golpe durísimo que se llevaría el cuadro de Garrido en la primera mitad.
Pasado unos minutos, el Betis se repuso y comenzaba a salir la figura de Baptistao. El primer fichaje del mercado de invierno destacó sobre manera en su debut. Todas las jugadas de ataque de los verdiblancos llevaban la firma del delantero. En el 4′ su tiro lo mandaba a córner la defensa visitante. En el 5′ se encontró con Andrés Fernández y posteriormente, dos disparos suyos los atajó el meta sin problemas.
El Betis lo intentaba, tenía posesión pero no daba sensación de empatar. Por contra, Osasuna si tuvo el segundo si Andersen no hubiera realizado la parada del partido en el 17′. Pasaban los minutos y no llegaba el empate, pero Leo lo seguía intentando. El brasileño se movía cómodo y se iba convirtiendo en el mejor de la primera mitad. Un tiro suyo volvió a tener una misma respuesta de Andrés Fernández, enviado la pelota a córner cuando muchos veían el empate. Y cuando empezaban a entonarse los locales vino el segundo golpe, la expulsión de Nono.
El canterano vio la segunda amarilla, la primera la obtuvo en el 21′ cortando una contra. Si el gol enfrío a los verdiblanco, la expulsión los congeló y así se llegó al descanso. Movió el banco Garrido en el intermedio. Molina sustituyó a Salva y Jordi hizo lo propio con Juanfran. La entrada a los segundo cuarenta y cinco minutos llegó con la más clara del partido para el Betis. Buena triangulación entre Rubén y Molina y el pase de este lo remata Baptistao con Andrés Fernández de nuevo en su papel salvador. Pero a perro flaco todo se le vuelve pulgas y en el 11′ Jordi introducía en su portería un balón de De las Cuevas.
La desolación crecía por momentos y más aún cuando Rubén falló un penalti estrellándolo en el larguero. Andrés Fernández cometía un fallo en su salida y se llevaba por delante al canario pero no estuvo acertado el ariete. Con poco los rivales le crean mucho peligro y superan en el marcador a los de Garrido y es algo que no sólo ha sucedido este domingo. Desde ese error, Rubén desapareció pensando una y otra vez en ese larguero. No pudo conseguir el gol pero se igualaron las fuerzas aunque el Betis recibía dos nuevos golpes importantes que hacían cortar las ideas de un equipo que poco a poco fue naufragando en el encuentro.
El esfuerzo pasaba factura a Baptistao y Chuli lo sustituía. Buena entrada del onubense que protagonizó dos lanzamientos pero su mejor acción vino con Molina. Pared entre los dos delanteros y Molina que la enchufaba por la escuadra. Oxígeno en forma de gol para un equipo que no se encontraba. Se atacaba más con corazón que cabeza. Vadillo servía con un taconazo una pelota que remataba Chuli y que pedía penalti por manos de Arribas. Pasaban los minutos y el equipo se iba desdibujando entre acciones que se quedaban a medio hacer. En los minutos finales, Osasuna tuvo dos contras para matar el choque pero no lograron hacer el tercero y al Betis se le escapaba una nueva oportunidad para remotar.