El Real Betis se reencuentra con el triunfo ante el Lleida Esportiu gracias a los tantos de Verdú y Molina en el estreno de Juan Carlos Garrido en el banquillo.
Victoria balsámica de un Betis ofensivo, vertical y con ganas. El estreno de Juan Carlos Garrido en el banquillo tuvo el efecto deseado sobre un equipo que necesita renacer y que ha dado buenas sensaciones en el Camp D’ Esports frente a un Lleida que pronto se quedó con diez. Aún así, la lectura del encuentro deja detalles muy positivos que los verdiblancos deberán confirmar ante rivales de mayor entidad.
Para el Betis ahora mismo no hay partido menor o cita secundaria. Sólo le vale ganar e ir recuperando autoestima y confianza. El primer once de Juan Carlos Garrido estuvo diseñado para ello. El entrenador apostó por un bloque con clara vocación ofensiva y algunas novedades. Andersen ocupó la portería y Chica volvía a ocupar el lateral derecho en un 4-2-3-1 en el que Lolo Reyes y Nono repetían como tándem en la medular. Juan Carlos y Juanfran ocupaban las bandas para que Verdú enganchase por el centro con Molina.
El partido se puso pronto de cara para el Betis. El meta Pau Torres cometía penalti sobre Molina y además veía la roja en el 4’. Perales, sin embargo, detenía el lanzamiento del alcoyano tras adivinarle la intención. No se vino abajo el Betis, que aprovechó su superioridad numérica para buscar una y otra vez la portería rival frente a un equipo que se afanaba por frenar las acometidas verdiblancas. Juan Carlos, muy incisivo, explotó al máximo su banda bien apoyado por Nacho.
Los saques de esquina fueron un peligro constante contra los locales y Chica pudo hacer el segundo con un gran remate de cabeza que despejó un hasta entonces muy inspirado Perales. El Betis siempre intentó tratar bien la pelota y llevar con criterio el balón al área. Así se fraguó el segundo penalti, señalado por una mano de Barreda dentro del área. Turno para Verdú que lanza a lo panenka; con categoría y mucho suspense puso el 0-1 en el marcador.
El segundo gol se mascaba y parecía cuestión de tiempo. Molina se quitó la espina y marcó a placer tras aprovechar un doble fallo de la defensa y el meta del cuadro catalán.
Así se llegaba al descanso, con la tranquilidad que da un buen resultado. Juan Carlos tuvo el 0-3 en la reanudación. Recibió un buen pase en largo de Verdú, pero su tiro cruzado desde fuera del área no encontró portería. El Lleida intentó presionar más la salida del balón y acortó distancias, aunque su tanto llegó en un claro fuera de juego. Un saque lateral acabó siendo rematado por Pere Milla ante la incredulidad de Andersen y la zaga verdiblanca.
El Betis seguía dominando pero sin la profundidad del primer tiempo. Y conforme pasaban los minutos el anfitrión intentaba equilibrar la balanza. Mata tuvo un buena ocasión para ello pero falló en la definición. Los de Garrido controlaron la posesión aunque faltó mordiente. Un solitario disparo lejano de Chuli a punto estuvo de aumentar la cuenta a pocos minutos del final, pero el 1-2 no se movió. El Betis ha dado un paso anímico importante y deja la eliminatoria encarrilada.
Lleida Esportiu: Pau Torres; Barrera, Mario, Biel Medina, Fuster; Molo, Chupe (6’ Perales); Miramón, Dídac (84′ Osado), Milla (62′ Aldalur) y Mata.
Real Betis: Andersen; Chica, Paulao, Jordi, Nacho; Lolo Reyes, Nono (87′ Xavi Torres); Juanfran, Verdú (78′ Salva Sevilla), Juan Carlos (65′ Chuli); y Jorge Molina.
Goles. 0-1 26’ Verdú de penalti. 0-2 42’ Molina remata a placer. 1-2 (56’) Milla
Árbitro. Delgado Ferreiro. Mostró tarjeta roja a Pau Torres (4’), amarilla a Dídac (28’), Nono (36’), Molo (60′).