Rubén Castro2

En el Betis todo es malo, o al menos todo lo parece. Las virtudes se esconden bajo el ambiente enrarecido que envuelve al equipo con extrañas alineaciones, declaraciones que no se explican y un técnico que poco más puede probar para que su equipo gane un partido.

Por segunda vez en los últimos tres años, la figura de Pepe Mel está discutida en Heliópolis. La duda es saber cuánto, y si la afición impulsará la salida del técnico que se lo ha dado todo al club desde hace cuatro años. Aunque la debacle en el derbi, le haya hecho perder crédito, no se esperan demasiados pitos, más allá de los aislados para el técnico madrileño, una prueba más de que la masa social no lo considera el culpable de la asfixiante situación deportiva del Betis.

Más allá de Pepe Mel, lo más trascendente es que el Betis vuelva a ganar, sin importar el cómo ni los caminos que conduzcan el gol, no hay mayor necesidad que la de lograr un resultado con ventaja verdiblanca para que el equipo recobre esa confianza, que existió en determinados instantes de la temporada, pero que siempre fue muy efímera.

Sin encontrar resultados, el Betis iba a más, camino de una victoria que cesara sus males. Pero en lugar de encontrar un triunfo, halló la total descomposición del Sánchez Pizjuán, en el peor escenario posible, ante el peor rival posible y dejando al equipo con el peor de los ánimos posibles.

Empezar de cero es la receta que por enésima vez vuelve a preparar el técnico madrileño para el duelo de este domingo ante el Rayo Vallecano. Para ello, no es mal comienzo la digna derrota en la anécdota de Lyon, un partido en el que el Betis cumplió con un equipo de circunstancias, pero evidenció que en la principal de sus carencias, la creación en ataque, no hay visos algunas de mejora.

Pero todas las virtudes deben empezar aparecer en la matinal de este domingo, donde regresarán todos los que viajaron a Lyon y no estarán los sancionados por el derbi Matilla, Xavi Torres y Paulao. A estas alturas, después de todo lo malvivido, el Betis se acoge irremediablemente al que consideran como su salvador, un Rubén Castro, que ha seguido esta semana un plan específico para rendir al máximo de sus responsabilidades, ya sea de inicio o desde el banquillo, en una de las varias finales que le quedan al club de aquí a final de año.

Enfrente estará el penúltimo de la tabla, un Rayo Vallecano de múltiples aristas, un equipo suicida, débil o imparable, según se presente la tarde o la mañana, pero al fin y al cabo un equipo de la Liga del Betis, en la que pugnará al menos durante este tramo de la temporada para abandonar las posiciones de descenso. Será un duelo dominado por el nerviosismo en el que más allá de carencias propias o virtudes del rival, sólo debe tener un camino posible para los verdiblancos: la victoria.

Alineaciones probables

Real Betis: Sara, Juanfran, Jordi Figueras, Amaya, Nacho, Nono, Lolo Reyes, Verdú, Vadillo, Juan Carlos y Jorge Molina.

Rayo Vallecano: Cobeño, Tito, Galeano, Saúl, Nacho, Adrián, Trashorras, Lass, Jonathan Viera, Iago Falqué y Bueno.

www.SevillaActualidad.com