Tras la incontestable victoria conseguida dos semanas atrás en Granada, atraviesa el Betis un periodo de dudas, más allá de los resultados, pues un empate ante el Sevilla y una derrota ante el Real Madrid es un registro bastante asumible.
Olvidando análisis tácticos, en ambos partidos se echó en falta de la determinación que el Betis ha mostrado durante toda la temporada, para llevarse el partido en ciertos momentos clave. Adolecieron los verdiblancos de ello tras la expulsión de Medel en el derbi, con un solo gol de desventaja o tras el 2-1 ante un Real Madrid plagado de suplentes en lo que era una ocasión como pocas se presentan para puntuar en el Bernabéu.
Bien la envergadura de los rivales, o la presión de una plantilla nada acostumbrada a lidiar con objetivos europeos pudo pesar al Betis en los últimos dos duelos. Lo cierto es que pese a este minibache el conjunto verdiblanco conserva un margen de tres puntos sobre el Rayo Vallecano su perseguidor más cercano en la lucha por Europa y eso sigue permitiendo un cierto margen al grupo, aunque será más estrecho si continúa fallando.
Deportivo, Barcelona, Celta de Vigo, Mallorca, Zaragoza y Levante son las piedras en el camino del conjunto verdiblanco para amarrar su regreso a competiciones europeas. Seis partidos en los que, exceptuando la visita al Camp Nou y al Ciudad de Valencia, el Betis tendrá que lidiar contra la tensión competitiva de unos equipos atenazados por el drama del descenso.
Serán duelos asequibles en los que el Betis necesita reencontrarse con la seguridad ofrecida durante toda la temporada para aprovechar las dudas de sus rivales y certificar una clasificación para Europa, con la que muy pocos soñaban al inicio de temporada.