Los de Joan Plaza se impusieron en San Pablo por 70-64, en un partido en el que desaprovecharon una ventaja de hasta 13 puntos y que apunto estuvieron de perder. Ellis olvidó su lesión para liderar a los suyos, mientras que Ager debutó en ACB sin mucho acierto.
Sevilla Actualidad/Agencias. El Cajasol sumó esta mañana su tercera victoria en la ACB 2009/2010. Los de Joan Plaza se han impuesto por 70-64 en San Pablo. El equipo cajista comenzó fuerte en defensa y moviendo mucho el balón en ataque. Así, tomó el mando desde el principio y en el primer cuarto lograron una máxima ventaja de diez puntos en un par de ocasiones (14-4, m.05) (22-12 (m.10) con la gran aportación del base estadounidense Earl Calloway.
En el segundo cuarto, el entrenador del equipo vizcaíno, Txus Vidorreta, dio entrada a la cancha a su reciente incorporación, el alero estadounidense Robert Conley, quien sustituye provisionalmente por lesión a su compatriota Chris Warren. Una medida que no fue suficiente para que cambiara el rumbo del partido pese a lo inspirado del ala-pívot croata Marko Banik -máximo anotador al descanso con catorce puntos-.
El Cajasol, que disfrutó también del debut de Maurice Ager, no cejó en su empeño de aumentar el marcador. Turon Ellis saltó finalmente a la cancha, a pesar de llevar toda la semana arrastrando molestias en el tobillo, y se convirtió en el protagonista del encuentro. Ayudado por Juanjo Triguero bajo los aros, el equipo de Plaza cerró la primera parte con la máxima ventaja hasta el momento, de trece puntos (41-28).
Tras el descanso, la formación visitante mostró otra cara, mucho mas fuerte en defensa y además con sus primeros encestes desde la línea de tres, lo que motivó que se pasara de una máxima ventaja de catorce puntos para el Cajasol (47-33, m.25) a un parcial de 0-8 que metió al Bizkaia en el partido (52-45, m.30). Por parte del Cajasol, Savanovic se puso las botas en el tiro, para acabar con una anotación total de 14 puntos.
En el último cuarto la formación de Vidorreta se mantuvo fuerte en defensa y, con el alero Alex Mumbrú liderando la remontada, llegó a ponerse a tres puntos (66-63, m.38) de un rival que se apagó en ataque, recordando a pasadas derrotas como la del Joventut.