En estado puro, con altibajos pero mucho más altos que bajos, el conjunto sevillano ha logrado este sábado una victoria de fuste dando su mejor versión ante el CAI Zaragoza.
Apelando una vez más a esa secuencia acción-reacción que suele llegar tras una derrota dura como la de Vitoria, el cuadro cajista se rehízo para completar un brillante encuentro sublimado en el primer y último cuartos. De hecho, el primero fue un auténtico ‘canto al baloncesto’: 22-3. Luego, hubo más igualdad en el segundo (14-17) y dominio visitante en el tercero (21-28). Ese dominio se extendió hasta el inicio del último cuarto, cuando el CAI Zaragoza llegó a ponerse a cuatro (57-53). Fue un espejismo, ya que, partir de ahí, Bamforth rompió la tendencia con dos triples seguidos y nuevo parcial contundente para los locales (22-11).
El estadounidense tuvo un rol estelar no sólo en el último cuarto, sino en general en un partido del que fue MVP con 25 puntos y en el que rozó las dobles figuras (19 puntos y 9 rebotes). Su acierto en el tiro (5 de 5 en tiros de dos y 3 de 5 en triples) resultó clave, pero también su intensidad y sus ganas, personificando perfectamente el espíritu que mueve a este equipo.
Muy importante también volvió a ser Thomas Satoransky (12 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias para 17 de valoración), al igual que Landry (16 puntos anotados), aunque lo fundamental fue la voluntad del grupo, en el que todos aportaron. Del lado del CAI Zaragoza, Rudez y Roll, con 29 puntos entre los dos, fueron los mejores y catalizadores de una remontada que se ahogó en la orilla.
Lo que se avecinaba ya podía intuirse en los compases iniciales, con un Cajasol defendiendo como si no hubiera un mañana. Porzingis anotó los dos primeros puntos, que fueron contestados por un triple de Llompart. Y ahí el CAI Zaragoza se apagó por la electrizante intensidad de los de Aíto. El 2-3 dio paso a un parcial de 23-0 fundamentado en la efectividad de Bamforth y Landry. El primer cuarto acabó con 22-3 y aún en el inicio del segundo llegó otro triple de Alex Urtasun para poner el 25-3. Cuando se llevaban dos minutos rompió el CAI Zaragoza el parcial.
Fue una primera muestra de orgullo apoyada en una zona defensiva que ya no abandonaría en todo el partido. Con ese cambio defensivo y mayor acierto en ataque lograron los visitantes recomponerse con un parcial de 0-9 (25-12), pero Satoransky se puso las pilas anotadoras y al descanso se llegaba con un claro 36-20 mediando otro triple sobre la bocina del base checo.
El tercer cuarto pronto se convirtió en una batalla de triples que benefició al CAI Zaragoza, que en apenas 3 minutos recuperó el aliento ofensivo con 13 puntos. Rudez y Roll catapultaron a los suyos, lo que, unido a la tercera personal de Sate, puso un inquietante 46-40 en el marcador. El tiempo muerto de Aíto trajo de nuevo la inspiración de Bamforth y Landry, y al último acto se llegaba con 57-48.
Rudez y Roll siguieron a lo suyo, poniendo el 57-53 en el recién iniciado parcial final. No obstante, la figura de Bamforth se agrandó con dos triples seguidos y una canasta de dos que, unidos a otra de Sate, colocaron un tranquilizador 65-53 a seis minutos. De ahí al final, Mata y el poderío en la zona de Balvin hicieron que la ventaja creciera e hiciera más justicia al magnífico partido del Cajasol.
Ficha técnica
Cajasol (22-14-21-22): Satoransky (12), Bamforth (19), Mata (7), Porzingis (8), Balvin (10) -cinco inicial-, Landry (16), Willy Hernangómez (0), Alex Urtasun (4) y Franch (3).
CAI Zaragoza (3-17-28-11): Llompart (3), Stefansson (7), Rudez (16), Sanikidze (6), Morel (2) -cinco inicial-, Roll (13), Pere Tomás (6), Tabu (0), Fontet (4) y McCauley (2).
Árbitros: Martín Bertrán, Perea y Serrano. Sin eliminados.