capi-betis

Si hay un jugador que de verdad ha sentidos los colores del Real Betis Balompié, ese ha sido sin duda Jesús Capitán. O mejor dicho, «Capi» como le conocen los béticos.

Aida Bañuls. Natural de Camas, desde pequeño supo que quería dedicarse al fútbol. Pronto pudo acceder a la cantera de su equipo del alma: el Betis. Forma parte de esa generación de canteranos de oro del Betis junto con Joaquín y Juanito, que se hicieron un hueco en la selección española.

Su debut en el primer equipo, fue en 1997 frente al Valencia en Mestalla. Sin embargo, tuvo problemas para adaptarse a jugar en Primera División, por lo que fue cedido al Granada durante una temporada. Volvió renovado y con ganas de jugar en su equipo.

Desde ese momento, se dejó la piel en cada partido y se convirtió en uno de los favoritos de la afición: «Estuviera bien o mal, siempre me apoyaba. No sé que les habré dado, pero ese cariño ha sido impresionante» afirmaba.

Centrocampista luchador, las lesiones le impidieron tener una mayor continuidad, lo que le llevó en muchas ocasiones a perder la titularidad.

El encuentro que más recuerda es el derbi contra el Sevilla en la temporada 2000-2001 cuando ambos conjuntos se encontraban en Segunda División. Ese día Capi marcó un gol que nunca olvidará.

Sus diferencias con Manuel Ruíz de Lopera, le llevaron a tomar una de las decisiones más difíciles de su vida. Dejar el Betis. Lo hizo en junio de este año. Después de más de 13 años, y tras haber contribuido a que el Betis se proclamara campeón de Copa del Rey en 2005. ¿Su espinita? Despedirse del club en Segunda División.

Entre lágrimas y besando el césped que tantos buenos momentos le había brindado se despidió del conjunto de las 13 barras. La afición bética coreó al unísono su nombre. Un nombre que ya está escrito en la historia del Real Betis Balompié.

www.SevillaActualidad.com