Sevilla ha recibido este miércoles una en la Casa Consistorial a una representación de impulsores y participantes del ultratriatlón solidario Indoquivir, The Big River Project, a beneficio de la Fundación Vicente Ferrer (FVF), una prueba nunca antes realizada que cuenta con el río Guadalquivir como gran protagonista y que pasará, en cuatro etapas, por las provincias de Jaén, Córdoba, Sevilla, Cádiz y Huelva -desde su nacimiento hasta su desembocadura-. En total, serán 18 los deportistas afincados en Sevilla que participarán en esta competición

Esta iniciativa está impulsada por el club Predators, bajo el liderazgo del triatleta Manuel Olmo, en colaboración con el Club Náutico de Sevilla y Brazadas Solidarias. Más allá de la dimensión deportiva, en este ultratriatlón los deportistas buscan conseguir fondos para apoyar la construcción de un centro educativo para niños y niñas con parálisis cerebral en Dornala (Andrah Prades, India), de la mano de la Fundación Vicente Ferrer.

Más de 500 kilómetros de recorrido

El reto se desarrollará del 31 de mayo al 4 de junio. El segmento ciclista consta de 380 kilómetros que se cubrirán en dos etapas. La primera, desde Cazorla hasta Córdoba. La segunda, desde la capital cordobesa hasta Sevilla. El sector de carrera a pie unirá, a lo largo de 85 kilómetros de recorrido y en una única jornada, Sevilla y Sanlúcar de Barrameda. El grupo de nadadores, por su parte, ascenderá los 90 kilómetros del Guadalquivir entre Sanlúcar y Sevilla sin relevos.

Los deportistas se irán uniendo a Manuel Olmo en las diversas etapas conformando grupos y participarán en el ultratriatlón solidario Indoquivir Manuel San Emeterio; Mikel Valcárcel; José Calderón; Enrique Acosta; Benito Castellanos; Gema Ferrón; Pepe Rodríguez; Pedro Sánchez; Carlos Manuel Fernández; el ciclista con discapacidad José Antonio González, Sergio González Caballos; Juan Luis Pérez; Luis Pérez, Daniel Gil; Carlos Iturrate; Juan Carlos Ríos y Rafael Carmona.

Este último, que también es delegado de la FVF en Andalucía, Extremadura, Ceuta y Melilla, ha explicado que este reto servirá para ayudar a un sector de la población extremadamente vulnerable en la India rural: «Hay alrededor de 500 niños y niñas con parálisis cerebral en el distrito de Prakasham (India). Muchos de ellos necesitan acceso a una educación adaptada y a una atención adecuada a sus necesidades para acceder a una vida inclusiva y digna. Sin embargo, en esta zona del país no existen centros especializados. Además, debido al desconocimiento de las familias para proporcionarles los cuidados adaptados a sus necesidades, los problemas de estos menores pueden llegar a agravarse», relata Carmona.

El centro educativo cuya construcción quiere apoyar Indoquivir permitirá que los niños y niñas sean tratados por profesionales que podrán ofrecerles las herramientas y los cuidados necesarios para que puedan vivir de forma independiente y en condiciones de dignidad.