El delantero brasileño firmó un discretísimo partido ayer en el encuentro ante el Málaga CF, en su debut como titular con los verdiblancos.

Leandro Damiao sigue sin aclimatarse a las exigencias de la Liga BBVA. El punta jardimalegrense, tenía un magnífica oportunidad de demostrar su valía en un encuentro vital en pos de prácticamente certificar la permanencia para el Real Betis. De hecho, y bien como probatura, o bien simplemente como revulsivo, el técnico de los heliopolitanos, Juan Merino, optó por darle entrada en el once inicial siendo el acompañante en punta del canario Rubén Castro. Pero dicho invento falló.

Y es que el delantero brasileño, apenas encontró a lo largo del encuentro su sitio en el trascendental duelo, y vivió un más que descafeinado envite para sus intereses. Un discreto papel, que sin embargo, no le privó de tener en sus botas la oportunidad de adelantar-al menos por aquel entonces-al cuadro heliopolitano en el tanteador. Un disparo de Rubén Castro llegada el 55’, era repelido por el cancerbero visitante Guillermo Ochoa, y el rechace lo tocaba a puerta vacía y a tan sólo dos metros de la portería blanquiazul Damiao con, aún no se sabe qué zona del cuerpo, para mandarla fuera para la desesperación del respetable del Villamarín.

Un error, que no seria el único del sudamericano, que apenas un minuto más tarde, no conseguía esta vez empujar el esférico en una acción muy similar a la anteriormente citada. El punta, finalmente sería sustituido en el minuto 64 del envite por Jorge Molina, dando por finalizado pues su primera puesta en escena con el Real Betis como titular.