Kevin López no sintió ningún tipo de dificultades para alzarse con la plata/SA

El dúo hispalense de los 800 metros coronó un fin de semana brillante con la plata lograda por Kevin López en la final de la especialidad, un inmejorable aval para comenzar la temporada al aire libre repleto de moral.

La alegría del loreño contrastó, en cambio, con la desazón de Luis Alberto Marco, quien acabó pagando los esfuerzos en una última vuelta que lo relegó a la sexta plaza.

Una vez más, tanto Kevin como Luis Alberto trataron de hacer la mejor carrera en el momento clave. Bajo la atenta mirada de los mejores del año en pista, los sevillanos calcaron sus carreras de semifinales marcando el rumbo desde el inicio para, a la hora de la verdad, donde se deciden las medallas, soltar el látigo desde una posición favorable.

Marcando un ritmo sostenido, en el que por lo realizado esta temporada, ambos podrían haber rascado medalla, los ataques de los hombres fuertes hicieron su aparición. Con suma facilidad, el vigente campeón, Adam Kszczot sobrepasó la zancada de Kevin a la altura del 400. Sin embargo, el loreño no se vino abajo, manteniéndose firme a la estela del polaco, lo que le sirvió para conservar sin apuros la plata, pero lo dejó sin fuerzas para asaltar el oro. Finalmente, título para el polaco (1:48.69) y subcampeonato para Kevin López (1:49.31), quien mejora el bronce logrado en París dos años atrás.

Luis Alberto Marco, por su parte, no pudo igualar la hazaña de su compañero. El nazareno, lastrado por algunos problemas físicos, acabó desfondado en el intento de aguantar las embestidas de Anis Ananenka y Mukthar Mohammed (medalla de bronce), y finalizó la prueba en último lugar, soprepasado también por el ucraniano, Taras Bybik. La sexta plaza empaña una excepcional temporada, donde ostentaba la quinta marca europea de la temporada. No obstante la final representa un digno papel para el ya veterano sevillano.

En general, buen balance el de los sevillanos que con una plata y un finalista culminan en lo alto una gran temporada indoor, en la que optaron a lo máximo en cada carrera. Ahora, encararán el reto de la temporada al aire libre, donde pasarán de la lucha de las medallas a la pelea por entrar en la final del Mundial de Moscú de agosto, cuando, un año más, el poderío de los africanos convertirá a los 800 metros en la carrera más clara del planeta, en su pleno apogeo tras el reciente record mundial de David Rudisha.

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