Volver es ganar. Ese era el lema de LaLiga y lo que perseguía el Sevilla FC desde que se conoció que la competición volvería antes de septiembre. Tras muchos comentarios, conjeturas y preparación express, quedó claro que, pese a todo, la clasificación no es una anécdota. El Sevilla fue mejor en el cómputo global de los 90 minutos y lo pudo demostrar en el arranque de la primera mitad, declaran desde el equipo.

Ocampos abrió la lata de penalti y Fernando se erigió en uno de los mejores de su equipo con un gran remate de cabeza para sentenciar.

Nada más comenzar a rodar el balón se confirmaron las sospechas. Este fútbol no es de siempre, pero tocaba afrontar nada menos que un derbi y no había tiempo para probaturas. Apenas siete minutos tardó en llegar el primer poste sevillista de la reanudación de la temporada, un trallazzo de Ocampos a la misma cruceta. El Sevilla dominaba, pero el ritmo, como es lógico, impedía a los de Lopetegui hacer un fútbol con el que sorprender a su rival, que intentaba tener el balón pero sin demasiada profundidad.

Ya cumplido el ecuador del primer tiempo volvió a intentarlo el Sevilla, en este caso a balón parado. Acción ensayada que acabó en la cabeza de Koundé, que remató cerca del primer palo. Los sevillistas parecían retomarle el pulso al partido y De Jong tuvo la suya cerca de la media hora, pero su cabezo peinado se marchó fuera. El Betis seguía sin reaccionar y solo lo intentó con un tiro muy lejano de Canales desde la frontal. Eso sí, el último en probar suerte en la primera parte fue blanquirrojo. De nuevo Ocampos, con un disparo potente que Joel pudo despejar de puños antes de que Mateu Lahoz decretase el descanso.

El Sevilla tenía claro lo que quería y lo demostró a los dos minutos de la reanudación, con una gran internada de Jesús Navas y un remate que se acabó embarullando hasta que Munir remató demasiado flojo a las manos de Joel. No hubo más avisos, pues en la siguiente acción de peligro llegaba la acción del 1-0. Salto dentro del área de De Jong y agarrón de Bartra ante el que no duda Mateu. Ocampos toma la responsabilidad y engaña a Joel para su quinto partido consecutivo viendo portería.

Se había abierto la lata y el Sevilla estuvo más cómodo, pues el Betis seguía sin acercarse. Y si el primero llegó a balón parado, el segundo también, en este caso desde el córner. Óliver Torres lo bota, Ocampos prolonga con el tacón y Fernando cabecea como un auténtico delantero. Golazo para dejar el partido sentenciado y carrusel de cambios cuando el cansancio empezaba a hacer mella. Banega, En-Nesyri, Suso y Franco Vázquez refrescaron al equipo en el mejor momento, y aunque el Betis quiso reaccionar, la losa ya era demasiado pesada.

Impulso gigantesco de moral para el Sevilla FC, que seguirá al menos media semana más instalado en la tercera posición en la que ha permanecido congelado durante los tres últimos meses. Pero esto no para y casi no hay tiempo para degustar una victoria siempre especial. El próximo lunes, nueva cita liguera en La Nucía ante el Levante UD.