Roman Zozulia, actual delantero del Albacete y ex del Real Betis, ha anunciado este martes 18 de mayo que interpondrá «una demanda por vulneración del derecho» a su «honor» a Pablo Iglesias, secretario general de Podemos. Iglesias calificó de «neonazi» al futbolista en sus por sus declaraciones al diario ‘Marca’ el pasado 11 de abril.
El atacante ucraniano ofrece apoyo económico a un grupo paramilitar de ultraderecha ucraniano. Además, según el servicio de inteligencia ucraniano, Roman Zozulia es fundador de la organización militar Narodna Armiya. Este grupo paramilitar de ultraderecha opera en la zona Donbass contra las fuerzas prorrusas.
- Zozulya, con miembros del Narodna Armiya / @zozulyaroman18
«Como muestra de respeto al sistema democrático de España, una vez finalizado el período electoral he decidido interponer una demanda por vulneración del derecho a mi honor en respuesta a las declaraciones realizadas por el Señor Pablo Iglesias, líder del partido Unidas Podemos, sobre mi persona el pasado 11 de abril en el ‘Diario Marca'», explica Zozulia en un comunicado remitido a EFE este martes.
«Me gustaría comunicar que, en el caso de que la sentencia fuese favorable, cualquier indemnización compensatoria que pueda recibir por el daño causado, irá destinada íntegramente a asociaciones de Albacete que trabajen por la inclusión e integración de los más desfavorecidos, prestando especial atención al colectivo infantil», añade el ucraniano.
El pasado 11 de abril, en una entrevista en ‘Marca’, Pablo Iglesias fue preguntado: «Usted aplaudió en su momento que la afición del Rayo se posicionase contra la cesión de Roman Zozulia por su ideología ¿No le parece que el deporte debería estar por encima de la política?».
La respuesta completa de Pablo Iglesias fue la siguiente: «Si decimos cuestiones ideológicas suena terrible. ¿Pero sería razonable que un equipo en Alemania contratara a un jugador que hiciera el saludo romano o que lleva una esvástica tatuada? Probablemente, eso en Alemania generaría un conflicto por lo que significó el nazismo. Entonces, no hablamos de la opción ideológica de un futbolista. Los futbolistas tienen derecho a tener todas las opciones que quieran y además a mí me parece bien que los deportistas hablen de política como cualquier ciudadano. Hablamos de un neonazi y hablamos de racismo, que hace muchísimo daño en los campos de fútbol. Y creo que ahí la afición del Rayo dio un ejemplo de compromiso democrático. Opciones ideológicas todas, siempre y cuando respeten los derechos humanos».