Presentación nuevo espectáculo Año Murillo en la Torre de Don Fadrique /Ayto. Sevilla
Presentación nuevo espectáculo Año Murillo en la Torre de Don Fadrique /Ayto. Sevilla

Danza, mapping en directo, luz y música transformarán desde este miércoles las noches de la primavera y el verano en el Espacio Santa Clara. Tras la exposición ‘Murillo y su estela en Sevilla’, el antiguo convento de las hermanas clarisas vuelve a ser sede de Año Murillo para acoger un nuevo espectáculo del programa de artes escénicas ideado para el cuarto centenario.

El delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, la directora de Cultura, Isabel Ojeda, y el director de la obra, José María Roca, junto al elenco de bailarines, han presentado este lunes este montaje titulado ‘Los niños de Murillo’ y que supone una oportunidad única para descubrir el mágico patio de la Torre de Don Fadrique, integrado en el convento.

Según un comunicado, la propuesta convierte la emblemática torre, todavía una gran desconocida para los sevillanos, en una pantalla sobre la que aparecen los pícaros que con tanta vida y realismo retrató Murillo. Pero ahora, por vez primera, el espectador podrá verlos jugar, trepar, trapichear, asomarse o esconderse por sus ventanas y puertas. Mientras toda esa acción se produce sobre la fachada, convertida aquí en un lienzo gigante, cuatro bailarines danzan y juegan con las imágenes sobre el escenario.

Muñoz ha recordado que, a pesar de que las exposiciones deben ser la columna vertebral de la efeméride, entre los objetivos de la programación siempre estuvo invitar a otras artes que ayudaran a comprender y divulgar a Murillo y su tiempo.

«Queríamos que el maestro saliera de las salas para encontrarse con sus paisanos y con aquellos que nos visitan en espacios menos probables, jugando con el patrimonio y desde artes que trascendiesen la propia pintura. Hemos logrado que toda la ciudad se vuelque con esta celebración. Lo ha hecho el turismo, la hostelería y este verano también lo están haciendo las artes escénicas con ejemplos que conjugan calidad, vanguardia y parimonio, como es el caso de esta propuesta», ha enumerado Muñoz, que ha recordado que la cultura debe seguir produciéndose en la ciudad durante los meses de verano.

El delegado también ha ofrecido algunos datos relativos al éxito de los montajes más recientes de Año Murillo. Así, ‘Tras las huellas de Murillo’, que durante los fines de semana de mayo se representó en distintos enclaves históricos de Sevilla, superó las 140 personas en varios de sus pases. Por otro lado, más de 650 personas disfrutaron hasta el domingo de las cinco funciones de ‘Gratia plena’, el auto sacramental creado por Rafael Villalobos para este cuarto centenario y escenificado en otro espacio patrimonial poco conocido por el público, el Convento de Santa María de los Reyes.

Las críticas de ‘Gratia plena’ han destacado la perfecta armonía entre el espacio y el montaje, dos elementos que se han reforzado mutuamente en esta propuesta. Como lo harán desde el miércoles en ‘Los niños de Murillo’, un espectáculo que, como ha recordado Isabel Ojeda, se ha pensado para todos los públicos, con especial atención a los niños de hoy, que van a poder jugar y sorprenderse con los pícaros de Murillo.
«Queremos que el público siga conociendo Sevilla a través de los ojos de Murillo y de su mirada innovadora, esta vez en un lugar mágico y cargado de leyenda como es la Torre de Don Fadrique», ha añadido Muñoz.

Más de 20 personas han trabajado en la realización de este espectáculo que, según destaca el director, José María Roca, va a dejar en el público momentos únicos e inolvidables y que está pensado para ir directo al corazón y a las tripas: «Es un programa perfecto para las noches de verano, que juega con la noche, con la fuerza de las imágenes en movimiento, con el territorio y con la danza, una disciplina cuyo lenguaje elimina la barrera idiomática y convierte el espectáculo en una propuesta apta para los turistas que cada día nos visitan».

El director ha declarado que la fuerza del realismo de Murillo en sus pinturas de calle les ha facilitado la tarea de imaginar a esos niños en movimiento. «El montaje tiene tantos lugares a los que mirar que es probable que muchos quieran disfrutarlo en más de una ocasión, una opción que permite su precio, 6 euros, y su duración, en torno a los 35 minutos».

Los niños de Murillo se estrena este miércoles y podrá disfrutarse de miércoles a sábado hasta el 28 de julio excepto los días 21 y 22 de junio. Los pases son los miércoles y jueves a las 22,30 horas y los viernes y sábados a las 22,30 y 23,30 (segundo pase). También podrá verse los domingos 10 de junio y 1 de julio a las 22,30 horas.