Representación del retablo mayor de los capuchinos de Sevilla

Desde la invasión napoleónica en el siglo XIX que provocó la dispersión de la serie de pinturas que realizó Bartolomé Esteban Murillo para el convento de los capuchinos de Sevilla, las obras no se habían vuelto a encontrar hasta ahora con motivo de una exposición en el Museo de Bellas Artes de Sevilla que reúne a este conjunto artístico. La muestra supone el pistoletazo de salida al conjunto de actos en conmemoración del cuarto centenario del nacimiento del pintor sevillano, el Año Murillo, que marcará la vida cultural de la ciudad a lo largo de todo 2018.

‘Murillo y los capuchinos de Sevilla’ lleva por título la exposición que recoge el que se considera uno de los ciclos pictóricos más ambiciosos del siglo XVI español por su excepcionalidad y por el número de obras que lo componen. Un conjunto artístico que se podrá disfrutar en el Museo de Bellas Artes desde el día de hoy hasta el 1 de abril de 2018.

En la exposición se podrán observar las obras que en su mayoría forman parte de la colección del museo desde la desamortización de los bienes eclesiásticos que tuvo lugar en 1835. No obstante, se unen a la muestra obras prestadas procedentes de Alemania, Austria, Reino Unido y la Catedral de Sevilla.

Retablo mayor del convento de los capuchinos de Sevilla

Uno de los motivos relevantes de esta exposición que inaugura el Año Murillo es que el visitante podrá ver de cerca la composición El jubileo de Porciúncula. Esta obra, que ha sido cedida por un periodo temporal de diez años por el Museo Wallraf-Richartz de Colonia (Alemania), se trata de la pintura elegida por Murillo para que presidiera el conjunto de siete lienzos del retablo mayor de la iglesia del convento de los capuchinos de Sevilla en 1665.

En la muestra han llevado a cabo la disposición de los cuadros reconstruyendo ese altar que se componía de seis pinturas de motivos devocionales, El Arcángel San Miguel y el Ángel de la Guarda. También se encuentran en la exposición La Virgen de Belén y la Santa Faz que se incorporaron al retablo en el siglo XVIII.

La exposición está instalada en la Sala V, la antigua iglesia del convento mercedario donde se encuentra instalado el conjunto artístico y la sala de exposiciones temporales en la que el visitante encontrará dibujos en los que se recoge el proceso creativo del artista para esta serie.

Además, esta reunión de obras de la serie que el artista sevillano realizó para el convento de los capuchinos ha permitido la restauración de muchas de ellas, lo que ha favorecido recuperar la calidad original afectada por el paso del tiempo y ha contribuido a un mejor conocimiento de la técnica empleada por Murillo. De este proceso también serán partícipes los visitantes en la salta de exposiciones temporales, donde encontrarán información sobre el proceso de restauración y producción de la exposición.

Esta cita cultural se une a los actos organizados con motivo del 400 aniversario del nacimiento del pintor sevillano. Según el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, esta exposición es una “apuesta de éxito” y hace que “Sevilla se sitúe en el centro de las capitales españolas con la oferta cultural más potente de todo el país en 2018”.

Estudia Periodismo en la Universidad de Sevilla, por lo que se identifica como protoperiodista. Concibe el periodismo como una de las mejores formas de construir el día a día . Actualmente es redactor...