Cartelera; la película con la que Sandra Bullock ganó el Oscar, The Blind Side, se erige como la principal novedad de una semana en la que también llegarán una parodia española con Florentino Fernández, lo nuevo de Daniel Burman, y un retrato sobre la sexualidad en la tercera edad con Pilar Bardem y Rosa María Sardá.

Jesús Benabat. Este fin de semana abre la cartelera una película que nos suscita una franca curiosidad, incluso podríamos catalogarlo de morbo si ello no conllevara un desprestigio injusto hacia la misma y aquellos que la han hecho posible. Y es que, más allá de la calidad discutible que puede detentar la cinta de John Lee Hancock, el principal atractivo de The Blind Side (Un Sueño posible, en español) es evaluar si la locura colectiva que se adueñó de Hollywood hace tan sólo unos meses respecto a la interpretación de Sandra Bullock está plenamente justificada.

La carrera de la actriz, primorosamente adulada por el público estadounidense, no se ha caracterizado precisamente por la carga dramática o la exigencia de los personajes a los que ha interpretado, más bien al contrario. Sus roles más habituales se corresponden con muchachas torpes y enamoradizas al borde del absurdo (Mi novio quiere ser millonario, Siempre queda el amor, Amor con preaviso), o a heroínas de medio pelo en películas de acción de categoría B (Speed, La Red, Demolition Man).

Así pues, la expectación que nos invade ante la ocasión de disfrutar de la sorprendente ganadora del Oscar de este año se magnifica con los atenuantes mencionados o con el hecho de que también haya logrado el Razzie a la peor interpretación del año por Loca Obsesión, lo que ha supuesto todo un maratón de reconocimientos para la actriz, paradójicamente en la cumbre de su carrera.

En The Blind Side, por otro lado una película con argumento manido y convencional como es el del afroamericano marginado que pretende ser jugador de fútbol americano, Bullock interpreta al personaje que apoya incondicionalmente al muchacho y lo eleva a la quintaesencia del éxito. La cinta superó sorprendentemente los 200 millones de dólares en apenas unos meses, erigiéndose como la gran sorpresa de la temporada, algo que probablemente influyó en que también fuese nominada a la Mejor Película.

Y no es de extrañar tamaño éxito teniendo presente el indiscutido gusto del público americano por historias de superación personal edulcoradas y enaltecedoras de la iniciativa individual más allá de las circunstancias del entorno. Aún así, para ajusticiar será necesario ver esta película a la que damos un voto de confianza mínimo aunque necesario.

Más allá de Sandra Bullock, la cartelera de esta semana nos ofrece un amplio catálogo de propuestas. Para comenzar, tenemos dos estrenos españoles muy diferentes entre sí; por un lado La venganza de Ira Vamp, una parodia del género de terror de vampiros interpretada por el dúo televisivo (ahora por separado) compuesto por Josema Yuste y Florentino Fernández, y dirigida por Álvaro Sáez de Heredia, cuya filmografía puede llegar a ser la peor de la historia del cine (El robobo de la jojoya, Brácula:Condemor 2, Papá Piquillo, Ana y los 7).

En un registro antagónico, La vida empieza hoy retrata sin complejos un tema inédito en el cine; la sexualidad en la tercera edad. Pilar Bardem, en el primer desnudo de su carrera, y Rosa María Sardá componen el núcleo de una historia compleja y sin prejuicios de Laura Mañá, quien también dirige. La película se alzó con el premio de la Crítica del pasado Festival de Málaga.

También en clave hispana, no llega la última película del argentino Daniel Burman, señalado como unos de los realizadores con mayor potencialidad de Sudamérica (El abrazo partido, El nido vacío), quien también se acerca a la tercera edad en Entre hermanos aunque desde el planteamiento melodramático de dos hermanos que deciden convivir juntos tras la muerte de su madre.

Desde Francia, por su parte y fiel a su cita en la cartelera, nos llega ahora Villa Amalia de Benoit Jacquot, realizador prácticamente inédito en nuestro país, que cuenta en esta película con la siempre sugerente interpretación de Isabelle Huppert. Y una japonesa, Air Doll, sobre una muñeca hinchable que cobra vida y debe enfrentarse a una extraña realidad donde el amor también está presente.

Para finalizar, dos comedias estadounidenses de calidad más que sospechosa; la primera, Marmaduke, centrada en las andanzas de un perro que, según Carrie Rickey del Philadelphia Inquierer, “hace que Un chihuahua en Beverly Hills parezca Up»; y la segunda de Mark Steven Johnson (trágicamente conocido por ser el director de Daredevil o el El motorista fantasma), que presenta ahora una comedia romántica, En la boda de mi hermana, repleta de convencionalismos de este pseudogénero en la que aparecen Danny DeVito y Angelica Huston.

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