Así, y como ya confirmó el pasado diciembre la Caja de Ahorros, se traslada el deseo de que el edificio, construido como astillero en 1252 bajo el reinado de Alfonso X y propiedad de la Administración autonómica, pase a constituirse como un espacio destinado a la difusión de la cultura.
Sevilla Actualidad. Finalmente, el proyecto del ‘CaixaForum’, presentado por la Obra Social ‘La Caixa’, ha sido la única propuesta para la implantación de un centro cultural en el histórico edificio de las Atarazanas de la capital hispalense.
De este modo, y transcurrido los plazos fijados – certificación del registro a través del cual se expresa si se han presentado o no propuestas alternativas –, se llevará a cabo la propuesta de otorgamiento de la concesión firmada por la Secretaría General Técnica de la Consejería de Cultura. Posteriormente, se procederá al acuerdo de otorgamiento, gracias al cual se aprobará dicho otorgamiento y se aprobaran los pliegos de cláusulas administrativas particulares que regularán la concesión.
Desde la Consejería de Cultura se valora positivamente la propuesta de la Caja de Ahorros puesto que, «asegura su conservación permanente y utilización constante para fines de interés general sin coste alguno para el erario público». Además, la petición permitirá la rehabilitación definitiva de todas las naves del edificio a través de un proyecto arquitectónico respetuoso con los valores del monumento, ya que las obras perseguirían la restauración del Bien de Interés Cultural así como la instalación de un ‘CaixaForum’.
Las Reales Atarazanas de Sevilla fue mandado a construir por Alfonso X el Sabio en 1252, para la construcción de barcos que navegaran por el vecino Guadalquivir y el Mediterráneo. Más tarde, se prepararían las naves que comerciarían entre el nuevo y el viejo continente.
La actividad como astilleros se transformó al instalarse en la primera nave la pescadería. A finales del siglo XVI, las naves 13, 14 y 15 se transformarían para alojar la aduana. A continuación, tendría un uso puramente militar hasta que en 1993, la Junta de Andalucía comprara el edificio a la Gerencia de Infraestructura de Defensa.