La Comisión de Patrimonio autoriza la restauración de las dos pinturas de Francisco de Herrera El Mozo (1627-1685) de la Catedral de Sevilla tituladas «Triunfo del Sacramento de la Eucaristía» y «El éxtasis de San Francisco». Los cuadros serán trasladados al Museo Nacional del Prado con motivo de la exposición que bajo el título de «Francisco de Herrera ‘el Mozo’ y el Barroco total», tendrá lugar entre el 25 de abril y el 30 de julio de 2023.
Esta exposición presentará una perspectiva novedosa de la producción del pintor, uno de los artistas más singulares e innovadores del barroco en España. Para este proyecto el Museo ha solicitado el préstamo de los dos cuadros, que pertenecen a la Hermandad Sacramental del Sagrario de Sevilla.
El cuadro «Triunfo del Sacramento de la Eucaristía» fue un encargo que la Hermandad Sacramental del Sagrario hizo a Francisco de Herrera “el Mozo” hacia 1655, y su muestra en el Prado supondrá una aportación crucial puesto que ejemplifica la llegada a Sevilla de las corrientes italianas de la pintura neoveneciana. Su presencia allí será clave para poder compararla con la producción madrileña de Herrera, especialmente con la obra «El sueño de San José» del Museo del Prado.
Desperfectos notables en los cuadros
Un primer análisis del cuadro en su lugar de ubicación ha obtenido como resultado que el lienzo presenta un ligero destensado. También se observan varias patologías, entre las que destacan principalmente algunos levantamientos puntuales en forma de ampollas, pérdidas de estratos repartidas por toda la superficie pictórica provocadas por rozaduras, restos de barniz oxidado que altera el cromatismo real de la obra y repintes puntuales, además de gran cantidad de polvo y suciedad superficial en los lienzos y en los marcos.
En el caso del otro cuadro, el titulado «Éxtasis de San Francisco», fue encargado al artista en 1656 por el Arcediano, mayordomo de fábrica y canónigo de la Catedral de Sevilla. El cuadro fue concebido como un retablo-marco tallado por el retablista Bernardo Simón de Pineda, para el proyecto de renovación iconográfica de la capilla situada junto a la del Bautismo, donde Murillo pintó su monumental «San Antonio». La fusión visual entre la «Visión de San Antonio» y el «Éxtasis de San Francisco» es, sin duda, uno de los cúlmenes de la pintura barroca española.
Este cuadro, que también se ha analizado in situ y al nivel del suelo, presenta un tensado aceptable a pesar de su gran tamaño y peso. Entre la patologías observadas se pueden enumerar, entre otras, levantamientos puntuales en forma de ampollas, pérdidas de estratos repartidas por toda la superficie pictórica provocadas por rozaduras, barnices oxidados y gran cantidad de polvo y suciedad superficial, tanto en el lienzo como en el marco-retablo.
Las obras de Herrera el Mozo no serán trasladadas para su restauración
Los trabajos se desarrollarán in situ y por el anverso de la obra, dado que en principio no necesitaría una intervención sobre el soporte, además del elevado coste que supondría el desmontaje y posterior traslado a un espacio para su intervención, de manera que será necesario la colocación de un andamio que facilite el acceso a todas las partes de la superficie pictórica.
La restauración de estos cuadros constituirá uno de los hitos de la exposición, y permitiría entender lo mucho que debe a este artista la conformación de la pintura barroca en España, tanto en Sevilla como en Madrid.
El principal criterio que se va a seguir en la actuación será el conservativo y de recuperación del original, de manera que se eliminarán todos los elementos ajenos a la obra, siempre y cuando la consecución de estos fines no suponga una agresión al conjunto general.