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‘Grupo 7’ solamente se llevó dos estatuillas de las 16 a las que optaba. La familia León se fue con las manos vacías.

El Centro de Congresos Príncipe Felipe de la ciudad de Madrid acogió la vigesimoséptima edición de los Premios Goya, otorgados por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España. En una gala presentada por el «humor» de Eva Hache y donde la crítica política se personificó en la figura del Ministro de Educación y Ciencia, José Ignacio Wert, que recibió su propio premio Goya: las denuncias a la gestión de su cartera, así como a temas de actualidad como la corrupción, los recortes y los desahucios.

Para este año había tres grandes candidatos: ‘Blancanieves’ de Pablo Berger, que con 18 nominaciones era la máxima candidata, la sevillana ‘Grupo 7’ (Alberto Rodríguez) con 16 nominaciones y la superproducción de Juan Antonio Bayona ‘Lo Imposible’, con 14 nominaciones.

Y esa superioridad numérica también se vió en los premios. ‘Blancanieves’ se levantó por encima del resto con 10 estatuillas, incluídas las de mejor película y mejor actriz (Maribel Verdú). La producción muda y en blanco y negro es indiscutiblemente la gran ganadora de la noche. Un homenaje de Berger a una época en la que el cine aún no se tenía que reinventar a sí mismo en época de crisis y donde la mayor característica del mismo era la magia.

Cuando Alejandro Amenábar salió al estrado a presentar el premio al mejor director, todo el cine andaluz miraba al sevillano Alberto Rodríguez. Sin embargo, el nombre que estaba impreso en el sobre era el de Juan Antonio Bayona, que seguramente merezca cotas más altas dentro del séptimo arte. Le queda hacerse encuentra haciendo las Américas en el mundo del séptimo arte. Aparte de ese Goya, ‘Lo Imposible’ salió con 3 premios más. Peor suerte tuvo ‘El artista y la modelo’ de Fernando Trueba, que se quedó sin estatuillas.

Antonio de la Torre se quedó sin Goya a mejor actor, que  se llevó José Sacristán, un clásico del cine español que ganó su primera estatuilla tras una larga carrera en el celuloide. De la Torre también optaba a la mejor interpretación de reparto que ganó Julián Villagrán por su papel en ‘Grupo 7’. En su discurso, tuvo un detalle con su Trebujena natal. Y Joaquín Nuñez, con su Goya a mejor actor revelación, fueron las victorias del filme sevillano. En total solamente 2 de 16 nominaciones. Un mal sabor de boca y un tropiezo del cual hay que levantarse con energías renovadas.

La familia León, que asistía a la gala con tres nominaciones bajo el brazo (Paco León a mejor dirección novel, María León a mejor actriz de reparto y Carmina Barrios a mejor actriz revelación) fue una de las desilusiones de la velada al no llevarse ningún Goya de los que optaban. ‘Carmina o revienta’ pasó con más pena que gloria por la ceremonia.

La coproducción catalana y andaluza ‘Los niños salvajes’, con 3 nominaciones, tampoco consiguieron llevarse el gato al agua. Y «marcaron»  la anécdota de la noche, ya que cuando se anunció el premio a la mejor canción original, los entregantes se habían equivocado y habían anunciado  en un  principio a Pablo Cervantes, para posteriormente rectificar a favor de la BSO de ‘Blancanieves’. Dejamos para otros las posibles conspiraciones y trampas. Más suerte tuvo la otra película con presencia andaluza ‘Juan de los Muertos’, de Alejandro Brugés; que venció en la categoría de mejor película iberoamericana. Esta era la única nominación del filme cubano.

A título individual tampoco tuvieron suerte el montador sevillano Fernando Franco (‘Grupo 7’), el malagueño Ramón Salazar por la adaptación de ‘Tengo ganas de ti’ y el gaditano José Manuel Serrano por el documental ‘Contra el tiempo’. En el apartado de cortometraje de animación, el cine andaluz estaba representado por ‘Alfred & Anna’, de Juanma Suárez, y ‘¿Por qué desaparecieron los dinosaurios?’, de Mar Delgado y Esaú Dharma. Finalmente, el ganador fue Javier Maestro por ‘El vendedor de humo’.

No tuvo suerte el cine andaluz en esta 27ª edición de los premios Goya, Sin embargo, hay que quedarse con los datos positivos: el récord histórico de 29 nominaciones de la producción audiovisual autonómica y, por supuesto, con todos aquellos que disfrutaron viéndolas en la pantalla grande. Habrá más galas y premios, y esperemos que nuestro celuloide siga allí. Enhorabuena a los premiados. Y corten.

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