¿Cómo hacer caracoles? Cuando se aproxima la primavera, los caracoles comienzan a poblar las cartas de los bares y restaurantes de la ciudad de Sevilla. Pero esta tapa típica de primavera sevillana también se puede hacer en casa. ¿Cuál es la receta tradicional?

Existen muchas tipos de recetas, pero te contamos cómo hacer la receta tradicional de caracoles.

¿Cómo cocinar caracoles? Ingredientes

  • 3 kilos de caracoles.
  • Una cabeza de ajos.
  • Una cebolla.
  • 35 gramos de especias surtidas compuestas de cilantro, pimienta negra y comino.
  • Una cayena.
  • 100 mililitros de aceite de oliva.
  • Un puñado de sal.
  • Dos o tres ramas de hierbabuena.

Elaboración de los caracoles

Una vez remojados los caracoles para que se desprendan de las posibles impurezas que puedan traer consigo, se procede a lavarlos para que suelten la baba. Para este proceso solo necesitamos echar un puñado de sal y vinagre sobre los caracoles. Una vez vertidos estos dos ingredientes, los removemos con las manos para que vayan soltando la mucosa.

Cuando hayan soltado una cantidad de baba contundente, remojamos los caracoles de nuevo para limpiarlos en profundidad. Tras remojarlos, repetimos el proceso de lavado con sal y vinagre, hasta que no desprendan más baba o mucosa. El último paso de la limpieza de los caracoles consiste en hervir los caracoles en una olla durante aproximadamente diez minutos. Transcurrido este tiempo, apartamos la olla y volvemos a lavar los caracoles con agua fría.

Al finalizar el proceso de limpieza, comenzamos a cocinarlos. En una olla vertimos los caracoles, junto a la cabeza de ajos entera, la cebolla pelada y cortada en cuatro trozos, el aceite de oliva, las especias surtidas, y la sal.

A continuación, llenamos la olla de agua, y encendemos el fuego en nivel medio-alto. Para que los caracoles queden bien tiernos, el tiempo aproximado de cocción es de entre 2 horas y 2 horas y media, dependiendo del tamaño de los caracoles. A 15 minutos de la finalización de la cocción, añadimos las ramas de hierbabuena.

Una vez finalizada la cocción, dejar reposar y servir en un plato hondo acompañado de parte del caldo.