El fotógrafo Antonio Camoyán muestra ‘Río Tinto. El alma del paisaje’ en el Teatro Auditorio Riberas del Guadaíra.
Las actividades mineras en la cuenca del Tinto, los diversos paisajes de sus riberas y las huellas de la presencia humana en la zona han quedado recogidos por el objetivo del fotógrafo, en una amplísima colección que supera ya las 60.000 imágenes, de las que ha seleccionado una veintena en lienzo y más de 100 que se pueden contemplar en formato digital a través de varias pantallas dispuestas en la sala expositiva en Alcalá de Guadaíra.
Nada que estuviera presente en los alrededores del Tinto ha pasado desapercibido a la atenta mirada del fotógrafo. Para entender el origen de esta exposición, hay que remontarse a otra de las pasiones de Antonio Camoyán: la pintura. Dentro de ella, el artista se ha sentido especialmente atraído por los pintores norteamericanos que desde finales de la Segunda Guerra Mundial desarrollaron la variada corriente estética del expresionismo abstracto y, sobre todo, por la obra de Mark Rothko y sus experiencias con los campos de color, a base de grandes franjas de color dispuestas en el cuadro de manera horizontal.
Sus cuadros tratan de expresar las emociones humanas más elementales. Unos paisajes que serán bien distintos dependiendo de quién sea el que se sitúa ante ellos, por lo tanto cada cuadro nace de la pura subjetividad, otorgando al espectador un papel prioritario.
Antonio Camoyán ha detenido su mirada sobre suelos, paredes y perfiles de los alrededores del río Tinto y los ha captado en toda su rotundidad, sin añadir ni quitar color alguno, dando la voz a la propia tierra que nos muestra una inaudita riqueza cromática, un extenso abanico de verdaderos campos de color en los que además es bien perceptible la diversidad de texturas. Un tipo de paisajes del río Tinto que la cámara observa en primer plano.
Sus emocionadas y emocionantes fotografías nos muestran el alma del paisaje. De un paisaje esencial en el que la naturaleza ha dado origen a uno de los lugares más originales de nuestra geografía.
Como ha dicho de esta exposición, Juan Diego Caballero Oliver, Catedrático de Historia del Arte, “una visión expresionista que invita, mediante la fotografía, a la contemplación introspectiva y silenciosa de esos campos de color naturales que estallan ante nuestros ojos. No es poca cosa: el alma del paisaje”.
Antonio Camoyán es un enamorado del campo de la fotografía de la naturaleza, tema al que viene dedicándose de manera ininterrumpida desde su juventud. Su extensa trayectoria le ha llevado a los lugares más diversos, para captar desde múltiples puntos de vista la riqueza y diversidad del medio natural. En el Parque Natural de Doñana, trabajó como jefe de los servicios fotográficos de la Estación Biológica. Ha realizado numerosas exposiciones y catálogos, acumula diversos premios y ha sido jefe de los Servicios fotográficos de las revistas Periplo y Ronda Iberia. También es miembro fundador de la asociación ecologista Andalus y colaboró intensamente en la creación de la Agencia de Medio Ambiente germen de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.