La Biblioteca de la US en el Prado acumula 4 meses de retraso
Galería de las nuevas infraestructuras de la Hispalense
Hasta 150 millones de euros en infraestructuras, 100.000 metros cuadrados de nueva construcción y cerca de 1.500 puestos de trabajo. Son las cifras de la gran renovación que la Hispalense está haciendo hasta 2012. Ante cambios académicos, cambios en las infraestructuras.
Hasta 2012, hasta 24 proyectos posibilitarán a la Universidad de Sevilla “contar con un entorno físico adecuado para el desarrollo profesional de los alumnos” que además permitirán adaptarse a “los nuevos modelos docentes y los recursos que ofrecen las nuevas tecnologías”, declaró el vicerrector de Infraestructuras de la Hispalense, Antonio Ramírez de Arellano.
En un desayuno informativo, Ramírez indicó que, obviando las ya finalizadas Guardería del Campus de los Perdigones, Facultades de Derecho y Ciencias del Trabajo y Escuelas Universitarias de Ciencias de la Salud -edificios de Fisioterapia y Podología, entre otros- la Universidad tiene previstos hasta 2012 un total de 24 proyectos.
Los proyectos se reparten entre infraestructuras docentes -aularios, nuevos centros, bibliotecas o laboratorios-, de investigación -centros y fondos de investigación, medios audiovisuales- y de servicios a la comunidad -guarderías, residencias universitarias, poliderportivo-.
Las fuentes de inversión para abordar estos proyectos, que suman 150 millones, provienen, según precisó, de tres vías. En primer lugar, la aportación de la Junta de Andalucía, que de 2006 a 2010 invierte 600 millones de euros para la renovación de infraestructuras, un 25 por ciento con destino a la US. En segundo lugar, los fondos propios de la Universidad de Sevilla, que ascienden a unos 500 millones de euros. Y por último, la tercera forma viene dada por la financiación asignada desde los Fondos Feder y otros fondos estructurales dirigidos a la construcción de infraestructuras de investigación.
El proyecto estrella de estas actuaciones consiste en la museización del edificio del rectorado. Ramírez de Arellano, insistió en la intención de la Hispalense de «devolver al edificio histórico su esplendor», conjugando el funcionamiento en sus instalaciones del Campus de Humanidades -Facultades de Filología, Geografía e Historia y Filosofía después de su traslado desde el Campus de Ramón y Cajal-, con un proyecto de musealización.
Tal proyecto se financiará, en principio, con fondos propios de la universidad (obras de arte, cuadros). También se pedirá a Altadis que ceda maquinaria antigua para contextualizar la fábrica de tabaco. Entre las tareas de restauración están las Fachadas de piedra de arenisca, las Portadas del siglo XX, las Carpinterías del edificio y el Cerramiento principal a calle San Fernando. Se pretende la recuperación de circulaciones y demolición de las entreplantas.
La inversión en esta remodelación es de 40 millones de euros y se estima el plazo de actuación en seis años. Sin embargo, la universidad pretende realizar todas las actuaciones actualmente planteadas con un horizonte puesto en 2012.
Ciencias de la Educación
Hablando ya de otros proyectos, Ramírez de Arellano destacó la futura Facultad de Ciencias de la Educación, que se ubicará en el Campus de Ramón y Cajal. Con un presupuesto aumentado de los 22 a los 27 millones de euros por “mejoras del material empleado en la fachada fundamentalmente”, y una superficie de 25.000 metros cuadrados. Su finalización se prevé para diciembre de 2009.
Con los 5.000 estudiantes de esta facultad, serán 20.000 los concentrados, junto con los pertenecientes a las Facultades de Derecho y Ciencias de Trabajo, en el Campus de Pirotecnia. En el anteproyecto de esta nueva facultad que se suma a un entorno ya masificado, no se contempla la habilitación de nuevas salas de estudios o comedor universitario, temas que están en la actualidad informativa por las quejas de los alumnos. Se hace previsible que si esto no cambia, es posible que siga habiendo problemas de sitio en las salas de estudio y largas colas en el comedor de Derecho.
Otras iniciativas pendientes
Para finales de año está prevista la finalización del Instituto de Biomedicina de Sevilla (IBIS), integrado dentro del complejo hospitalario Virgen del Rocío. Según el vicerrector, el edificio, de 8.000 metros cuadrados y con una inversión global de ocho millones de euros, está ya en periodo de pruebas, pero dada la complejidad del equipamiento -con una inversión de más de tres millones de euros- su puesta en marcha tardará aún unos seis meses.
El aulario de la Facultad de Odontología, de 1.000 metros cuadrados de superficie, en el Campus de los Perdigones dará servicio el próximo curso gracias a una inversión de 1,5 millones de euros. Por otro lado, el Polideportivo del Sadus Los Bermejales también estará listo a finales de año, pues las obras se encuentran «muy avanzadas», afirmó el vicerrector.
Respecto a la Facultad de Farmacia, proyecto aún embrionario -pendiente de aprobar un Plan de Necesidades definitivo- que se ubicará en el complejo hospitalario Virgen del Rocío y para el que se prevé una inversión de 27 millones de euros, Ramírez de Arellano admitió que es «normal que existan dudas al respecto», pues el cambio de la misma, ligada tradicionalmente a un entorno científico, a uno «clínico» será «muy profundo».
No obstante, defendió la necesidad de ampliar la superficie de la Facultad hasta los 25.000 metros cuadrados proyectados y señaló la «escasa» distancia entre el Hospital Virgen del Rocío y el Campus de Reina Mercedes, que en el futuro podrían conformar prácticamente una «unidad», una especie de ‘Campus Sur’, tal y como refirió.
De otro lado, afirmó que la Universidad de Sevilla mantiene abierta una línea de diálogo con el Ayuntamiento de la ciudad respecto al traslado de la Facultad de Bellas Artes y la Escuela Universitaria Politécnica a los terrenos de los Gordales (el actual campo de la Feria), a la espera que el Consistorio municipal determine su postura respecto al uso que se le va a dar a esta superficie de modo definitivo.
La futura residencia universitaria de Pino Montano, contemplada dentro del Plan Estatal de Vivienda, ya cuenta con suelo cedido por el Ayuntamiento de Sevilla, según informó. El complejo, que se dotará de 300 habitaciones se situará en una zona de expansión de la ciudad y atenderá la demanda de los estudiantes de la Cartuja y la Macarena.
Entre los proyectos en fase de estudio se encuentra el traslado de la Facultad de Medicina de su ubicación actual en el barrio de la Macarena. Se recordó la «dificultad» que entraña el proyecto, con una inversión prevista de 30 millones de euros, por la conjunción de intereses que ha de darse entre el Ayuntamiento de Sevilla, la Consejería de Salud y la propia Facultad, que ya ha manifestado su deseo de «renovarse sea en la ubicación que sea».
La Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica, La ampliación de la Biblioteca de Arquitectura y Arquitectura Técnica, la Fundación de la Universidad de Sevilla y el Instituto de Desarrollo Regional en San Laureano, son algunos de los retos de futuro que la Hispalense se ha marcado.
Como vemos, un enorme catálogo de intervenciones que, quizás, intenten soterrar de una vez por todas, las críticas que la institución está recibiendo desde los reacios a la implantación de los nuevos grados y el Cadus (máximo órgano de representación estudiantil), con su guerra contra el nuevo Reglamento de Estudiantes.