“Por fin”. Esa era las palabras que salían de la boca de muchos de los hermanos de La Milagrosa que, entre lágrimas de alegría y emoción, celebraban la noticia.
Se pone fin a varios años de espera, largos tal y como nos asegura su hasta entonces presidente, ahora Hermano Mayor, Javier de Martos. Por fin la Agrupación Parroquial de La Milagrosa es hermandad de penitencia, concretamente la número 70 de Sevilla.
Así lo hizo sabe el Arzobispado de Sevilla durante la función a la Virgen de la Medalla Milagrosa del pasado domingo 29 de noviembre que presidió Monseñor Juan José Asenjo. Durante la misma, se hizo entrega del decreto por el cual se reconoce a esta agrupación como hermandad de penitencia. La misa se celebró en el templo parroquial abarrotado de hermanos y de numerosas autoridades, entre ellas el alcalde de la ciudad, Juan Espadas; y miembros del Consejo General de Hermandades y Cofradías, con su presidente Carlos Bourrelier a la cabeza.
“Sentimos una gran satisfacción y una tremenda alegría porque, después de 18 largos años de trabajo hemos conseguido ser hermandad de penitencia. Ahora comenzamos una nueva etapa intermedia en la que seguiremos trabajando en nuestra Parroquia”, asegura De Martos en declaraciones a Sevilla Actualidad.
Preguntado por la incorporación de las túnicas de nazareno como hábito para la próxima salida procesional, el hermano mayor en funciones asegura que aún no hay decisión al respecto: “Supongo que en los próximos días nos sentaremos los miembros de la junta de gobierno y decidiremos sobre ese asunto. Son muchos los puntos que hay que tratar y mucho el papeleo y las gestiones que hay que hacer, no sólo es el tema de las túnicas. Somos neófitos como hermandad de penitencia y nos sentaremos con el delegado diocesano para que nos oriente y ayude”. Dicha túnica, ya diseñada y guardada en el borrador de sus reglas, será blanca con escapulario verde oscuro en el antifaz blanco.
La nueva Hermandad de La Milagrosa escenifica en su paso de misterio, el más largo de Sevilla, un pasaje evangélico no representado en la ciudad hasta su incorporación. En este paso se puede observar a judíos cruzando el puente Cedrón con Jesús preso. Todas las imágenes, incluida la del titular cristífero, son de José Antonio Navarro Arteaga. Por su parte, la Vigen del Rosario es oba de Francisco Buiza.