Existe una serie de frutas con unas características muy concretas que podemos denominar como frutas de primavera. Se trata de las fresas, los nísperos, el melón y las cerezas.
En este artículo vamos a hablar de las propiedades de cada una de ellas:
Fresas
• Son bajas en calorías (33 Kcal/100g), contienen fibra, que ayuda a regular el tránsito intesti-nal y además reduce la sensación de hambre.
• Contienen antioxidantes llamados fenoles que mantienen la salud de las células.
• Son una fuente rica en vitaminas del grupo B, tales como la vitamina B6, la niacina, la ribo-flavina, el ácido patogénico y el ácido fólico. Poseen además una fuente considerable de vi-tamina C.
• Son ricas en manganeso, un mineral que actúa como un potente antioxidante y antiinflama-torio.
• Ayudan a potenciar la salud de los huesos ya que son ricas en magnesio, potasio y vitamina K.
• Tienen un efecto antienvejecimiento ya que el ácido pelágico mejora la elasticidad de la piel y retrasa la aparición de los signos de envejecimiento a la vez que ayuda a mantener las uñas y el pelo sanos.
• Son una importante fuente de vitamina C, por tanto las convierte en un poderoso antioxidan-te que potencia el sistema inmunitario.
Nísperos
• Son muy bajos en calorías(47 Kcal/100g), su alto contenido en fibra ayuda a combatir el es-treñimiento y a proteger la mucosa del colon.
• Ayudan a controlar el colesterol en sangre.
• Nos aportan vitamina A, importante para una buena salud visual y dental.
• Contienen antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres.
• Son ricos en potasio que ayuda a controlar la presión arterial.
Melón
• Está compuesto en un 90% por agua y aporta muy pocas calorías (34 Kcal/100g)
• Aporta vitamina A que nos ayuda a evitar la sequedad en las mucosas y en la piel.
• Aporta vitamina E, un poderoso antioxidante.
• Es muy diurético y actúa como un laxante suave.
• Nos aporta fibra y minerales como potasio, calcio y zinc.
Cerezas
• Son bajas en calorías (50 Kcal/100g)
• Contienen antioxidantes llamados antocianinas que ayudan a la reducción de enfermedades cardiacas y cáncer.
• Son una de las pocas fuentes alimenticias de melatonina, un antioxidante que ayuda a regu-lar el ritmo cardiaco y los ciclos del sueño del cuerpo.
• También, son una importante fuente de betacaroteno, de hecho contienen hasta 19 veces más que los arándanos y las fresas.
• Ricas en vitaminas C, E, potasio, magnesio, hierro, ácido fólico y fibra.
• Ayudan a la salud del cerebro y a la partida de memoria.
• Por su contenido en antiocianinas pueden reducir la inflamación y los síntomas de artritis y la gota.
• Como todas las frutas, son una importante fuente de fibra.
Con toda esta información espero convenceros para llevar a cabo ese importante reto de comer nuestras cinco piezas de entre fruta y verduras al día.