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La alineación de Rennella y Molina juntos en la delantera era un claro mensaje de Merino a los suyos.

No iba a pasar de puntillas el Real Betis por un partido de vuelta en el que existían opciones, aunque la remontada estaba complicada por tener que ganar con una diferencia de dos tantos. Precisamente por ese motivo, el Betis jugó ordenado y sin conceder peligro al Almería aunque la posesión era local.

No se vieron ocasiones claras de gol en el primer acto. El balón parado era la mejor arma verdiblanca como así se demostró en el minuto 8 de partido cuando Perquis cabeceaba un esférico que Molina intentaba rematar a gol en el segundo palo. La jugada quedó invalidada por fuera de juego. El Betis estaba bien plantado sobre el terreno de juego, las combinaciones rojiblancas no ponían en apuros a Dani Giménez pero las jugadas individuales de Wellington Silva y Thievy sí que acarreaban serias inquietudes. Bien es cierto que las acciones de ambos no se concretaban pero las continuas rupturas de líneas por arrancadas y regates en tres cuartos de cancha hacían que el Betis se replegase.

Este movimiento hizo que Molina y Rennella se quedaran muy aislados arriba y tuvieran que disputar cada balón dividido. Aún así, Rennella dispuso de un disparo que se le fue cruzado previo robo de balón de Molina y pase de Dani Ceballos. Thievy puso la réplica con una jugada similar. Su disparo también se marchó fuera. Mucho respeto de ambos equipos por no encajar gol. La primera mitad se cerró con una buena jugada de Dani Ceballos, un magnífico pase a Xavi Torres que no pudo hacer más porque el línea levantó el banderín. Una acción en la que el mediocentro no se encontraba en posición ilegal.

Con muchas interrupciones se abrían los segundos cuarenta y cinco minutos, y con sustituciones, algo que viene siendo habitual en Merino. Rubén Castro y Cejudo entraron por Rennella y Ceballos. No hubo tiempo a verse la reacción en el juego verdiblanco porque el Almería se adelantó en el marcador. A balón parado, en jugada de estrategia, Michel adelantó a los suyos en el minuto 13. Se le complicaba aún más la eliminatoria. Merino ponía en liza a Pacheco que salía al campo por Kadir y mientras que Jordi Figueras remataba de cabeza demasiado flojo un córner que se sacaba justo después del cambio.

El Betis no conseguía imprimirle el ritmo que deseaba al partido y el Almería no necesitaba acelerar nada. Pacheco lo intentaba por banda derecha pero no fluían las asociaciones en los últimos metros. Cuando el Betis más dominaba llegó el segundo. Zongo se inventó un derechazo desde el centro del campo que se coló en la meta de Dani. Golpe importante pero independientemente del resultado, el Betis siguió intentándolo. En el 32′, Pacheco lanzó una falta que puso en complicaciones a Julián que mandó a córner. Nuevamente, Pacheco cogió la pelota y su lanzamiento fue el origen del gol de Perquis que marcó con un fuerte disparo tras una dejada de Piccini.

Cuando se entraba en el tiempo de descuento, Molina le sacó un claro penalti a Julián. Rubén lo tiraba pero su disparo se marchaba al larguero y el colegiado pitaba el final del partido. El Real Betis queda eliminado de la Copa del Rey y piensa ya en el partido contra el Real Racing Club de Santander y conseguir cerrar el año con cuatro victorias consecutivas en Liga.