El Baloncesto Sevilla ha presentado este lunes a Luis Casimiro que el pasado domingo debutó como entrenador ante el Valencia Basket.
Casimiro ha afirmado en su presentación que «el reto» es salvar la categoría, un trabajo «duro» pero en el que tiene «confianza en sacarlo adelante entre todos». Casimiro ha asegurado en sala de prensa que, «después del partido de ayer», aún no sabe si «hacen falta refuerzos», aunque garantizó que no le «temblará el pulso a la hora de tomar decisiones», si bien por ahora prefiere «dejar los fichajes en ‘stand by’ dado el alto nivel de implicación de los jugadores».
El técnico manchego ha pedido a su plantilla «jugar con sentimiento y con el corazón» para «defender a este club» y resaltó que ha «percibido que el grupo quiere salir adelante, está muy implicado. Esos intangibles hay que mantenerlos».
No obstante, Luis Casimiro ha admitido que «el club está sondeando el mercado» y, aunque «los que están son los que valen en este momento y no hay que pensar en lo que va a venir», no cierra la puerta a una incorporación, pero reiteró que «no vale ningún jugador que no sienta estos colores, por muy bueno que sea».
El nuevo preparador del conjunto hispalense también ha subrayado que «todo» lo que le «ha sorprendido hasta ahora ha sido positivo», porque ha «visto que los jugadores están limpios para hacer su trabajo sin excusas». Además ha asegurado que «venir a Sevilla» no le «costó nada porque estaba deseando venir».
Por su parte, el presidente del club, Fernando Moral, ha afirmado que «Luis Casimiro ha sido un valiente viniendo en esta situación», que calificó de «complicada por haber perdido ante rivales directos» por la permanencia. «Acabamos la primera vuelta en descenso directo y pensamos que teníamos que cambiar cosas. Luis era una opción de categoría. Sitúo a Casimiro en los niveles de experiencia de Aíto o Plaza».