España hizo vibrar a San Pablo en un partido en el que los hombres de Juan Orenga intimidaron en la pintura para dejar en nada el potencial físico angoleño, pese a dejarse ir en el segundo periodo.
La superioridad española fue notoria en Sevilla desde el salto inicial. La selección empezó pausada, sin demasiado ritmo y las primera superioridades llegaron desde el lado visitante con un acertado Eduardo Mingas, máximo anotador de los africanos, desde la línea de los 6,75. Pero rápidamente España se hizo con el encuentro gracias al poder de sus pivots.
El entendimiento entre Pau Gasol, Ibaka, Marc Gasol y Felipe Reyes, independientemente de quien esté sobre la pista, es uno de los mayores botines de esta selección y en Sevilla quedó más que demostrado. Tras los primeros compases el acierto de los africanos descendió considerablemente gracias al trabajo intimidatorio local que inhabilitó el potencial físico que se le presuponía al rival y que no apareció para ningún lado. Y si la cosa se atasca siempre están Sergio Llull y sobre todo, Juan Carlos Navarro para desnivelar la balanza.
Así España se marchó de seis en el primer cuarto y de 17 al descanso. La consistencia de Felipe Reyes, sumando siempre minutos de calidad bajo el tablero, fue otro de los bastinones de un equipo que debe mejorar mucho para convertirse en bicampeón del mundo. Se echó en falta más de Rudy Fernández, aunque acababa de salir de la lesión, y de Víctor Claver, que no termina de entrar en la dinámica de este grupo campeón.
El mejor del partido, como no podía ser de otra manera fue Pau Gasol. 17 puntos, 5 rebotes y 24 de valoración fueron sus números en un partido, donde el rey del espectáculo no fue otro que Serge Ibaka con un repertorio exquisito de mates e intimidación.
A estas alturas de la preparación, lo lógico es que España bajase el pistón en la segunda mitad, tal como sucedió. Esto le sirvió a Angola para cosechar un marcador más aseado, a sólo nueve puntos de los de Orenga, quien reconoció en rueda de prensa que todavía es pronto para enseñar demasiado a los rivales. El objetivo es ser campeón del mundo y esto sólo es el camino, donde el resultado es una mera estadística.
Junto a los Pau, Ibaka, Navarro y compañía el otro gran protagonista fue el público sevillano que llenó San Pablo para disfrutar como nunca de la fiesta del baloncesto español, demostrando que la fiebre por el basket es posible en esta ciudad. Quizás haya que concebir el deporte de otra manera, como parte de un espectáculo donde las canastas y la pelota naranja son el ingrediente fundamental. España consiguió su séptima victoria en Sevilla y la selección le dio las gracias a una ciudad que sabe disfrutar con el deporte.
Ficha técnica
España (22-23-18-16): Ricky Rubio (5), Sergio Llull (14), Rudy Fernández (1), Pau Gasol (17), Serge Ibaka (13) –quinteto inicial- Sergio Rodríguez (6), Navarro (9), Calderón (-), Felipe Reyes (7), Víctor Claver (5), Marc Gasol (2).
Angola (14-14-15-21): Armando Costa (-), Edson Ndoniema (4), Valdelicio Joaquim (16), Milton Barros (4), Eduardo Mingas (17) –quinteto inicial- , Hermenegildo Santo (2), Joaquim Gomes (10), Reggie Moore (17, Islando Manuel (-).
Árbitros: Peréz Pizarro, Julio Carlos y Benjamín Jiménez.
Incidencias: Unos 7.000 espectadores presenciaron el encuentro en el Pabellón de San Pablo.