El Cajasol dio un paso de gigante este domingo para acercarse a la permanencia ante el Lagun Aro. Un palmeo del reciente fichaje Mensah-Bonsu sobre la bócina propició una importante victoria que deja muy tocado a su rival.
Pese a la igualdad e ambos conjuntos, el Cajasol salió mucho más asentado que su rival al pabellón donostiarra. La presión estaba en el tejado del adversario, al que no se le permitían más fallos. Así, el conjunto sevillano logró una cómoda ventaja de seis puntos al final del primer cuarto gracias a su acierto en el tiro exterior y el dominio del rebote ofensivo gracias a un gran Sastre.
En el segundo cuarto el Lagun Aro conseguía mantenerse en el encuentro a duras penas, pues la dura defensa cajista dificultó mucho todas las acometidas locales. Pudo marcharse en el marcador, pero no lo hizo ya que los donostiarras llegaron a la segunda parte con vida gracias a varias acciones de Papamakarios, Doblas y Salgado, con un brillante triple final.
El tercer cuarto acrecentó la tendencia negativa del Cajasol, finalizando la manga con sólo cuatro puntos de ventaja sobre su adversario. Los peores presagios se cumplieron y el bloque sevillano llegó a la última jugada en igualdad, pero un gran palmeo de Mensah-Bonsu, en su mejor partido desde que llegara a Sevilla dio a los de Aíto un gran triunfo que los coloca con tres victorias de ventaja sobre la salvación a falta de cinco partidos para la finalización del campeonato.
Lagun Aro GBC (15-22-13-25): Raulzinho Neto (11), Finley (5), Papamakarios (3), Woods (14), Doblas (13) -cinco inicial-, Guille Rubio (4), Paunic (8), Ibekwe (4), Dani Díez (0), Julen Olaizola (0) y Javi Salgado (13).
Cajasol (21-23-15-18): Satoransky (16), Tepic (5), Joan Sastre (15), Bogdanovic (10), Triguero (0) -cinco inicial-, Asbury (2), Balvin (6), Blackney (4), Holland (7), Mensah-Bonsu (12) y Burjanadze (0).
Árbitros: Pérez, Bultó y Rial. Sin eliminados.
Incidencias: Unos 6.500 aficionados en el Donostia Arena de San Sebastián.