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Compartir el tiempo de la cena favorece el vínculo familiar y fomenta una alimentación saludable. Más del 65% de los padres andaluces afirma que las verduras no pueden faltar en el menú.

Cenar en familia ayuda a desarrollar una serie de hábitos y rutinas: para los niños andaluces lavarse las manos antes de cenar (casi un 76%) y ayudar a poner y quitar la mesa (casi un 70%) son las principales.

Las familias de hoy en día están más ocupadas que nunca; compatibilizar los trabajos con el cuidado de los niños y la casa provocan que las jornadas sean cada vez más largas y las agendas estén repletas de actividades. Por eso se hace necesario encontrar un momento para compartir y conversar, que suele ser el de la cena, en el que padres e hijos comentan lo que han hecho durante el día. Así lo piensa el 24,7% de los andaluces. Compartir mesa porque es una norma de la casa resulta una obligación para el 60% de los andaluces, según el estudio “Cenas en familia” elaborado por la consultora independiente Toluna Analitycs, a nivel nacional, para Bonduelle.

Beneficios de las cenas en familia

El 98% de los andaluces cena habitualmente en familia. Están de acuerdo en que es el mejor momento para transmitir valores y enseñar buenos hábitos alimenticios a sus hijos. Los expertos coinciden en que sentarse a la mesa todos juntos conlleva una serie de beneficios. A este respecto, los andaluces consideran que favorece el vínculo familiar (67,2%), es una manera de fomentar una alimentación saludable (32,4%) y, además, mejora las habilidades comunicativas y sociales de todos los miembros de la familia (30,5%).

Los andaluces suelen conversar en torno a la cena. Así lo explica el 92,9% de los encuestados. ¿Los temas? Las conclusiones revelan que la cena es un buen momento para hablar sobre los estudios (73%), temas banales o los planes previstos para el día siguiente (45,9% en ambos casos). Los andaluces también suelen ver la tele (61%) mientras cenan.

En el momento de sentarse a la mesa, los andaluces parecen tenerlo claro. Un 83,2% de los encuestados reconoce establecer una serie de normas a la hora de cenar, frente al 16,7% que no lo considera necesario. Intentar que los niños mantengan una buena conducta en la cena no es fácil pero hay que intentarlo. El 74,9% de los encuestados considera como requisito fundamental dejar el móvil fuera de la mesa, seguido de los que abogan por no levantarse antes de terminar de cenar (59,4%), evitar los aparatos de música y las tablets (52%) y tener la televisión apagada (un 27,8%).

Por otro lado, cenar en familia ayuda a desarrollar una serie de hábitos y rutinas, asociados a este momento, en los niños. Lavarse las manos antes de cenar (casi un 76%) y ayudar a poner y quitar la mesa (casi un 70%) son las principales actividades que los niños relacionan con el momento de cenar. Le siguen lavarse los dientes después de cenar (58,5%) y reponer lo que haga falta en la mesa, como pan, agua o servilletas (casi un 28%).