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Último debate a tres antes del 22M

Los tres partidos afrontaron el debate aumentando la tensión y el tono de un debate estático donde la presentadora reprendió en varias ocasiones a Díaz por hablar fuera de tiempo. Moreno volvió a tirar de recursos gráficos y Maíllo se desmarcó del ‘pim, pam, pum’.

Debate aburrido, sin tensión y con pocas propuestas. El segundo y último debate de los candidatos del PP, PSOE e IU a la Junta de Andalucía fue una copia brusca del que tuvo lugar en Canal Sur. Fue hora y media de monólogos, sólo interrumpidos por la socialista Susana Díaz, que interrumpió en varias ocasiones al candidato popular, Juanma Moreno, lo que le costó que la moderadora, María Casado, le pidiera varias veces «por favor» que dejara intervenir al popular.

El primer bloque del debate, referido a economía y empleo, ha sido bastante tenso ante los constantes rifirrafes entre Moreno y Díaz, quien ha interrumpido en numerosas ocasiones al candidato ‘popular’ acusándole de «mentir» en sus declaraciones. De hecho, la socialista le avisaba en su primera intervención que cada vez que mintiera le interrumpiría, informan agencias.

La presidenta de la Junta y candidata a la reelección por el PSOE ha acusado este lunes al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de «castigar y marginar» a Andalucía, mientras que el presidente del PP la ha calificado como «la presidenta del paro».

Por su parte, el candidato de IU a la Presidencia de la Junta, Antonio Maíllo, ha acusado a Díaz y Moreno de hacer «teatro» y ha lamentado lo «poco que se aprende en la vida en los aparatos de los partidos». Ha criticado las «puñaladitas dialécticas» entre ambos candidatos y que ninguno dé una respuesta clara sobre cómo afrontar el «paro estructural», mostrándose «indignado» por el hecho de que Rajoy haya prometido un millón de puestos de trabajo.

El PP pretende eliminar los aforados

El candidato del PP a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha propuesto acordar entre todas las fuerzas políticas la retirada del aforamiento a los 109 diputados del Parlamento andaluz, mientras que la candidata del PSOE, Susana Díaz, ha reivindicado su «ejemplo» contra la corrupción. Por su parte, el candidato de IU, Antonio Maíllo, le ha pedido a ambos que «pidan perdón» a los andaluces porque están «pringados de corrupción».

Estos mensajes se han lanzado durante el segundo bloque del debate, centrado en la confianza en la vida pública, regeneración democrática, participación ciudadana y transparencia, en el que Díaz ha remarcado, dirigiéndose a Maíllo, que no va a permitir que «nadie ponga en cuestión» su honestidad y su honradez porque «soy una persona decente» y ha dejado claro que tampoco va a permitir que «se tire el nombre de Andalucía por el barro».

El candidato ‘popular’, quien ha propuesto también la creación de una comisión de expertos independiente, que fis calicen y controlen la vida pública, cree que Díaz «lo ha tenido fácil y no lo ha hecho, ya que aforó a tres exconsejeros y no compareció en el Parlamento», momento en el que la candidata socialista, tras varios ‘rifi-rafes’, le ha interrumpido para decirle que «miente» y que comparece «cada 15 días».

Para Maíllo, «la confianza se rompe cuando no se hace lo que se dice y la corrupción corroe la democracia» y ha criticado «la política de titulares», echándole en cara a Díaz que no pidiera los escaños a los expresidentes de la Junta de Andalucía Manuel Chaves y José Antonio Griñán tras ser imputados por el Supremo.