Las matronas andaluzas se enfundan en el color rosa para protagonizar una nueva ‘marea’ que recorrerá las ocho provincias para que se reconozca su trabajo en los centros de salud.
Están en una situación verdaderamente embarazosa. Cada año son más de 400 las que se especializan, pero difícilmente encuentran un hueco en el sistema sanitario. Por eso reivindican su sitio y escogen el rosa para teñir de este color las ocho provincias andaluzas.
Matronas de toda Andalucía, agrupadas en la Asociación Andaluza de Matronas, van a iniciar esta misma semana la que esperan sea una ‘marea rosa’ para explicar su función antes, durante y después del parto y, a su vez, sumar apoyos en su reivindicación de no ser sustituidos por enfermeros del SAS para realizar las tareas para las que se han formado durante mucho tiempo.
“Desde el año 96 las plazas de residente han aumentado, pero todas estas matronas que se forman luego no tienen su sitio en los centros de salud, donde los trabajos los siguen realizando las enfermeras”, explica Concha Gamundi, vocal de la Asociación Andaluza de Matronas.
Gamundi asegura que son muchas las matronas que hacen falta, sobre todo, en los centros sanitarios de Atención Primaria, donde sus funciones son cubiertas por enfermeros que no se han formado como Especialistas Internos Residentes, un proceso que exige una preparación de dos años para asistir a la mujer mucho más allá del momento del parto.
“Tenemos un papel esencial en la prevención de enfermedades de la mujer, pero también realizamos talleres de acompañamiento durante la menopausia, les enseñamos a sobrellevar todos los cambios que sufre su cuerpo y, sobre todo, no las dejamos solas tras el parto”, explica.
Y es que, si para algo pretende servir también esta ‘marea rosa’ es para dar a conocer sus funciones en el sistema sanitario. Concienciar a los andaluces de que la matrona no sólo está para darle la mano a la parturienta. “Pese a la necesidad, no hemos logrado salir de los paritorios”, se lamenta.
Desde la Asociación Andaluza de Matronas aseguran que las diferencias en unas provincias y en otras son importantes, generando “mujeres de primera y mujeres de segunda”. “Hay provincias con centros de salud sin matronas o con un número muy escaso”, dice Concha Gamundi. Y va más allá cuando apunta a un “sesgo de género”. “No se le da toda la importancia que requiere a la salud de la mujer”, incide.
De hecho, las matronas alertan de que en las clínicas y hospitales privados con los que la Junta de Andalucía mantiene conciertos no existe la obligación de contar con esta figura. “Pedimos que la mujer tenga la posibilidad de ser atendida por personal cualificado también en estos lugares financiados con dinero público”, reivindica. “Somos azafatas de día y pilotos por las noches”, confiesa.
El resquicio legal está en el ‘Proceso Asistencial Integrado de Atención al Embarazo, Parto y Puerperio’, un documento del Servicio Andaluz de Salud en el que se indica que la consulta en los centros de salud la puede realizar una “matrona, enfermera o médico de familia”, un aspecto que las matronas piden que se modifique para que sólo estas puedan pasarla.
El debate ya se ha trasladado al Parlamento a través de una pregunta formulada al Pleno por la parlamentaria de Izquierda Unida Mari Carmen Pérez. “Las profesionales que atienden a las mujeres andaluzas en el proceso del embarazo están cualificadas para prestar la mejor atención”, aseguró ante el Plenario la consejera de Salud, María José Sánchez Rubio.
Mientras tanto, será este mismo viernes cuando inicien su particular ‘marea rosa’ en Puerto Real, en Cádiz, con recogida de firmas y mesas informativas que el sábado, Día de la Mujer, trasladarán a Sevilla y Huelva para continuar en las semanas sucesivas por el resto de provincias andaluzas.
“Las matronas nos hemos ganado a la mujer”, asegura Concha Gamundi, “pero tenemos que ir más allá”, reconoce. Porque, hasta que eso llegue, seguirán siendo “azafatas de día y pilotos de noche”.