La propuesta que deberá ser ratificada por el Pleno abordará la creación de una empresa pública por Ley bajo la forma de sociedad anónima, controlada por el Parlamento y que debe evolucionar hacia la forma jurídica del Banca Pública con ficha bancaria.
El futuro ente deberá evolucionar para convertirse en una banca pública especializada de apoyo al tejido productivo, con una intervención en la economía de carácter anticíclico y en ningún caso debe ser un nuevo centro de gasto. Debe propiciar la generación de ahorros en el sistema actual, captar nuevos recursos públicos y privados y producir beneficios mediante sus operaciones.
Entre sus objetivos se establece el de impulsar la puesta a disposición de emprendedores autónomos, cooperativas y demás entidades de economía social así como las Pymes en general, de un sistema financiero más amplio, eficiente, accesible y diversificado; cuyos objetivos específicos serán, entre otros, actuar como principal instrumento de la política de crédito público dando cumplimiento a los mandatos derivados del Estatuto de Autonomía de Andalucía; concentrar la gestión de los instrumentos de crédito y avales en los que participa la Junta de Andalucía, reforzándolos y mejorando su accesibilidad; facilitar a las Pymes andaluzas el acceso a todo tipo de recursos financieros públicos y privados y potenciar el apoyo financiero a los sectores estratégicos para el cambio del modelo productivo de Andalucía.
Por otro lado, se establece que, paralelamente, debe evolucionar jurídica y estructuralmente para su consolidación como banco público.
Para la portavoz de Izquierda Unida en el Grupo de Trabajo, Rosalía Martín, no se trata de una solución para la “coyuntura nefasta” que vivimos desde el punto de vista de la economía pero “se trata de una herramienta que será estructural para el nuevo modelo productivo en Andalucía”.
Rosalía Martín aprovecha este comunicado para agradecer a cuantos agentes sociales, económicos y académicos han participado en el Grupo de trabajo para aportar sus conocimientos e ideas que han sido el pilar fundamental en la elaboración del dictamen final.
Por último, Martín quiere poner en valor la propia herramienta de los Grupos de trabajo en el seno del Parlamento de Andalucía que sirven para “elaborar, junto a la sociedad civil organizada, las leyes que nos rigen y nos regirán en el futuro”, una forma de legislar que “dista mucho de los Reales Decretos y de las formas autoritarias de otros Gobiernos”.