Francisco Cuenca ha sido elegido nuevo alcalde de Granda con los apoyos de dos ediles de Ciudadanos. Entre ellos se encontraba el exalcalde de Granada, Luis Salvador, que dimitió el pasado 1 de julio, y su edil de confianza, José Antonio Huerta.
El candidato socialista ha sumado a los 10 votos de su partido, los tres de IU-UP y, aunque el voto ha sido secreto, también los del exalcalde, Luis Salvador, y el del único concejal que ha seguido con el, José Antonio Huertas, ambos militantes de Ciudadanos. Con esos 15 votos Francisco Cuenca tiene mayoría absoluta.
Cuenca ha dicho en su discurso que convocará en breve a todos los partidos para “un gran pacto por Granada”. Tras esto, ha procedido a la firma del libro de honor donde ha escrito: “Asumo con honor la responsabilidad de ser alcalde de la ciudad a la que amo y en la que educo a mis hijos. Y lo hago con el compromiso firme de que los granadinos y granadinas se sientan orgullosos de quien los representa. La etapa que afronto debe llevar a mi Granada al lugar que le corresponde, al verso que la acompaña, al sueño que la guía y este no es otro que el de la igualdad y las oportunidades. Honrado y comprometido, Paco Cuenca. Alcalde”.
Tras este acto, Ciudadanos ha anunciado que expulsará del partido a Luis Salvador y José Antonio Huertas por votar a favor del socialista y saltarse las directrices de la dirección. En un texto, Ciudadanos dice que “han incumplido la directriz de voto para evitar a un alcalde socialista imputado, contribuyendo a facilitar la chapuza urdida en el PP”. “La dirección nacional de Cs desautoriza completamente el sentido del voto y emprenderá de inmediato las medidas necesarias para la expulsión de los dos ediles, previa apertura de expediente y suspensión de la la militancia”.
El PP intentó hasta el último momento que Cs apoyara a su candidato, pero ni la dirección nacional de Ciudadanos quería que eso sucediera, ni los dos concejales del partido en Granada, que han terminando votando a favor del candidato del PSOE.
Origen de los problemas
Todo esto ocurre tras los problemas en la coalición PP-Ciudadanos en este municipio comenzaron en julio de 2019. Fue entonces, en la toma de possión de Luis Salvador al frente del Ayuntamiento de Granada, cuando ambos partidos pactaron rotarse el gobierno pasados dos años, en la mitad de la legislatura. Este acuerdo no se llegó a firmar y tras la toma de posesión de Salvador, fuentes del partido de Arrimadas negaron ese pacto.
Con esta situación y pasados los dos años, cuando correspondería dicho relevo por parte del concejal del PP, Sebastián Pérez, ediles del PP decidieron dejar el equipo de gobierno. También concejales de su propio partido lo abandonaron, dejando solo a Salvador con un único concejal.
El pasado 25 de junio fue el punto de inflexión cuando los concejales del pleno pidieron a Luis Salvador que dejara la alcaldía de Granada. PSOE, PP, Vox y no adscritos abandonaron el pleno, mientras que IU-UP-Adelante se quedaron «por respeto» aunque también pedían su dimisión. El pleno tuvo que ser suspendido.
Ya hay algunas reacciones de políticos a esta investidura del socialista Francisco Cuenca en la alcaldía de Granada apoyada por los ediles rebeldes de Ciudadanos