Teresa Rodríguez /SA

IU y Podemos han despedido a cinco trabajadores del grupo parlamentario, entre los que se encuentran la delegada sindical. Minutos antes de que se constituyera la mesa para convocar las elecciones sindicales, la delegada se ha enterado del despido porque en su puesto de trabajo, Rafa Ibáñez, la mano derecha de Inma Nieto, le ha agarrado del brazo de forma violenta y le ha dicho que se ha rescindido su contrato y que le han mandado un burofax a su casa.

Los cinco trabajadores despedidos son algunos de los que cuentan con más antigüedad en la empresa. A dos de ellos, hace dos días la dirección de Podemos Andalucía los citaron para comunicarles que seguían trabajando y se les asignaron tareas para Podemos. Los otros dos despedidos restantes estaban de baja médica.

Además, instantes antes de que se constituyera la mesa de trabajadores para convocar las elecciones sindicales, CCOO ha llegado para impugnar las elecciones sindicales sin dar explicaciones de por qué lo hace. Curiosamente, de los 23 trabajadores de la plantilla, 19 son de CGT, uno del SAT y ninguno de CCOO. Este tipo de prácticas son más esperables de la patronal de una multinacional que de los partidos que dicen haber prohibido el despido.

Este despido viene después de casi dos meses de lucha sindical del conjunto de la plantilla de Adelante Andalucía para mantener sus puestos de trabajo. Durante este tiempo, los trabajadores han mostrado su preocupación por su estabilidad laboral tras los sucesos con la Mesa del Parlamento y los cambios en la dirección del grupo parlamentario.