Un paquete de marihuana procedente de Sevilla incautado en Francia dio inicio a la una investigación de la Guardia Civil que se ha saldado con la detección de un grupo organizado que se dedicaba a comercializar en Europa marihuana ilegal andaluza. Por el momento hay dos detenidos.
Se trata de dos ciudadanos chinos por Delito de Tráfico de Drogas, procediendo a la incautación de más de 40 kilogramos de marihuana y 2000 euros en metálico.
El pasado mes de octubre se tuvo conocimiento por componentes de la Guardia Civil de que en Francia se había incautado un paquete procedente de Sevilla que contenía unos 10 kilogramos de marihuana. Este paquete se encontraba en el interior de un camión de transporte de paquetería que circulaba por el eurotúnel transfronterizo con destino Reino Unido.
Por parte de guardias civiles de la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal (ODAIFI) de Sevilla, se inicio una investigación. Fruto de la misma se procedió a la detención de una persona menor de edad y de otra mayor de edad, ambos de origen chino, justo en el momento en el que efectuaron la entrega a un repartidor de una empresa de paquetería. El paquete contenía 14 kilogramos de cogollos de marihuana, asimismo se les incautó 2000 euros en metálico.
La Guardia Civil instruyó las correspondientes diligencias e hizo entrega del menor a Fiscalía de Menores de Sevilla y del mayor de edad al Juzgado de Instrucción en Funciones de Guardia de Sevilla, quedando el menor internado en un centro de menores de la provincia, debido a que se encontraba en desamparo por no tener a ningún familiar para hacerse cargo del mismo ya que todos residen en Cataluña.
Posteriormente se procedió a la incautación de 9 kilogramos de marihuana en un paquete y de otros 9 kilogramos en otro.
La Guardia Civil averiguó que los detenidos forman parte de un grupo griminal de ciudadanos chinos, perfectamente jerarquizados, residentes en Cataluña, los cuales se desplazaban periódicamente a Andalucía para comprar cogollos de marihuana en diferentes plantaciones, luego efectuaban envíos a través de diferentes empresas de paquetería desde las provincias de Sevilla, Huelva, Cádiz, Granada y Córdoba a países del resto de Europa como Inglaterra, Irlanda, Alemania, Holanda, Francia, Italia, Hungría etc…
Este grupo tenía perfectamente estudiada la cantidad máxima que podía enviar en cada paquete para evitar que se le aplicara el subtipo agravado de Delito Contra la Salud Publica de Notoria Importancia, que según el Tribunal Supremo se fijó en 10 kilogramos de marihuana, por lo que procuraban no superar esa cantidad.
La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.