Carne cruda. / SA

La juez de Instrucción número 10 de Sevilla, que investiga la causa por el brote de listeriosis producido este verano, ha decidido tener por personada en el procedimiento como acusación particular a la Junta de Andalucía tras la presentación por parte de la Administración autonómica de una querella contra la empresa Magrudis.

Asimismo, la magistrada ha ordenado la destrucción de la carne intervenida desde el pasado mes de agosto a Magrudis, que se estima podría alcanzar la cifra de unos 6.000 kilogramos, destrucción que deberá llevar a cabo el Ayuntamiento de Sevilla.

Además, las defensas de J.A.M.P. y S.J.M.R. han recurrido el auto de ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza dictado por la magistrada el pasado jueves, ya que, entre otros motivos, consideran que no existe riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas. Ahora, el Juzgado dará traslado a la Fiscalía y a las partes personadas para que se pronuncien sobre los recursos presentados, que son de reforma y subsidiarios de apelación ante la Audiencia Provincial, tras lo que resolverá los mismos.

El pasado jueves, la instructora tomó declaración a tres de las personas detenidas en relación con estos hechos y ordenó a petición de la Fiscalía y de la acusación que ejerce Facua el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de dos de ellas, en concreto J.A.M.P. y su hijo S.J.M.R., mientras que al tercero de los detenidos que pasó a disposición judicial, identificado como M.M.R., lo dejó en libertad provisional con la obligación de comparecer en el Juzgado los días 11 y 25 de cada mes.

La juez considera que los dos detenidos que permanecen en prisión, según se desprende de lo actuado hasta el momento, habrían cometido un presunto delito contra la salud pública en concurso ideal con tres delitos de homicidio por imprudencia, dos delitos de lesiones al feto con resultado de aborto y lesiones por imprudencia grave.