Aunque aún se desconocen los motivos por los que el convoy se paró a una veintena de kilómetros de la estación de Córdoba, los propios afectados hablan de que se vino abajo el sistema eléctrico. Un bebe tuvo que ser trasladado en ambulancia debido al intenso calor, pues el AVE se paró en torno a las 14:00 horas de la tarde.
Sevilla Actualidad. Más de seiscientos viajeros se han visto afectados este domingo por una avería del tren AVE que salió de Sevilla a las 13:45 horas de la tarde con destino a Madrid, y un bebé recién nacido ha tenido que ser trasladado en ambulancia debido al intenso calor que hacía en la zona en la que se quedó parado el convoy ferroviario.
Una portavoz de Renfe ha explicado que la avería se produjo por causas aún no precisadas a una veintena de kilómetros de la estación de Córdoba, hasta donde fue remolcado el tren para que los viajeros pudieran seguir el trayecto hasta Madrid, una operación en la que se ha tardado unas dos horas.
Durante ese tiempo, el tren abrió sus puertas, los viajeros salieron al aire libre y recibieron comida y bebida mientras se subsanaba la avería, según la misma fuente de Renfe.
Sin embargo, el bebé recién nacido tuvo que ser trasladado en ambulancia, ya que el aire acondicionado del tren no estaba operativo y porque así se consideró más oportuno debido al fuerte calor que hacía en esos momentos. Una ambulancia avisada por Renfe tardó cuatro minutos en llegar hasta la zona del tren averiado y trasladar al bebé y a sus padres, ha precisado la portavoz de Renfe.
El tren iba con más de seiscientos viajeros porque es de los considerados «dobles», es decir, que está reforzado para transportar a más usuarios en días de gran afluencia de público, como ha ocurrido este fin de semana.
Un familiar de los afectados ha indicado a Efe que a los viajeros les han explicado que el tren se ha averiado porque «se ha venido abajo» el sistema eléctrico, y ha lamentado el calor que han sufrido los viajeros «en medio del campo».