Buitre moteado o de Rupel, muy parecido al leonado excepto por el tamaño / Junta de Andalucía

La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha confirmado la instalación del buitre moteado o de Rupel (Gyps rueppelli) en Andalucía, una especie africana en peligro de extinción que habita en la franja ecuatorial del continente vecino. Habrían llegado cruzando el Estrecho infiltrados en grupos de buitres leonados.

Se trata de un animal recientemente catalogado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) como «críticamente amenazado», el último grado antes de la extinción mundial.

En la actualidad, la amenaza más grave que sufren ésta y otras aves necrófagas africanas es el uso de veneno, que ha diezmado las poblaciones en la última década. De hecho, técnicos de la Administración andaluza, de la Sociedad Española de Ornitología (SEO), del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de la UICN vaticinan que ésta podría ser la causa de su desaparición si no se consigue atajar a tiempo este problema en sus zonas de cría.

A pesar de su escasez, el buitre de Rupel se ha convertido en un visitante habitual de la geografía andaluza. De hecho, es común registrar su presencia cuando existe carroñada de gran tamaño, ya que convive con los abundantes buitres leonados, de los que en Andalucía existen 2.900 parejas reproductoras. Esta facilidad para pasar desapercibido se debe a que, tanto en su forma como en su coloración, el moteado es muy similar al buitre leonado (Gyps fulvus) con cierta diferencia de tamaño.

Según mantienen los expertos, la clave de su llegada a la comunidad autónoma andaluza podría deberse a su unión a grupos de buitres leonados europeos que vuelven al continente atravesando el Estrecho de Gibraltar tras haber permanecido una temporada en África. Por otra parte, algunos especialistas asocian la presencia de este especie en Andalucía con la similitud de las condiciones climáticas de ambos territorios.

Presente en la Península

Actualmente es posible observar este ave necrófaga africana en montes y muladares de la comunidad autónoma durante todo el año y de todas las edades, desde juveniles hasta adultos. Por tanto, su presencia en Andalucía deja de estar necesariamente ligada a los períodos migratorios, como sucedía hasta hace poco, e incluso cabe la posibilidad de que haya tenido lugar alguna cría en Andalucía no registrada hasta la fecha por encontrarse difuminado entre los numerosos buitres leonados. Además, los ejemplares de la especie originaria de África suelen asentar sus colonias en ubicaciones remotas, circunstancia que dificulta una prospección minuciosa. Por ahora, se ha constatado la reproducción del buitre moteado en la zona portuguesa del Tajo Internacional, limítrofe con Extremadura, y en Castilla-La Mancha.

En este sentido, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza en su mapa oficial de distribución del Rupel incluye una parte de España y Andalucía como área de residencia permanente en la misma categoría que las zonas africanas de reproducción de estos animales.

Mapa de la extensión del buitre moteado o de Rupel.