La consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, ha señalado hoy en Comisión Parlamentaria que el objetivo de la actuación del Gobierno respecto al acogimiento familiar de menores será extender la remuneración económica a la totalidad de las familias acogedoras.
El objetivo será incrementar el número, “ya que en el entorno familiar es donde mejor se adquiere y desarrolla el vínculo afectivo, conformándose los patrones de apego tan necesarios para el desarrollo emocional y social en los años de infancia”.
Aunque en la actualidad se remunera la totalidad de los acogimientos de urgencia y especializados, se plantea así la posibilidad de que igualmente ocurra con el acogimiento temporal y el permanente dependiendo de la situación económica de la familia acogedora. “En esta legislatura nos proponemos generalizar el apoyo económico a las familias acogedoras para compensar los gastos generados por la atención de los menores a su cargo, así como su dedicación y cualificación”, ha expresado la consejera.
Nuevas medidas
Entre estas iniciativas novedosas, se ha destacado también la creación de la tarjeta para la familia acogedora (Tarjeta Andalucía Siempre en Familia), que funcionará de modo similar a la de familia numerosa, ya que sus titulares disfrutarán de beneficios en determinados servicios públicos. Por otra parte, se ha planteado la modificación de la normativa autonómica para que las ayudas económicas por tercer hijo o partos múltiples se generalicen para todas las familias acogedoras.
En este sentido, la Consejería ya está trabajando en la redacción de un Estatuto de las familias acogedoras junto con la Plataforma de Asociaciones de Familias Acogedoras y Adoptivas de Andalucía, que contendrá los derechos y los deberes de estas familias y será un reconocimiento institucional y social a la labor que desempeñan.
Por otra parte, Rocío Ruiz ha informado sobre la puesta en marcha del Programa de atención psicoterapeuta. Mediante este, aquellos menores tutelados que hayan sufrido experiencias que puedan afectar negativamente a su desarrollo físico, social, emocional y afectivo, pueden recibir atención especializada de profesionales. De esta forma, se pueden tratar trastornos, problemas de relación, ansiedad o conducta disruptiva o violenta.
Con el objetivo de avanzar en la coordinación con los servicios educativos y sanitarios, se van a establecer nuevos protocolos para garantizar la protección de los datos de identificación de los menores y elaborar un plan de formación con la Consejería de Educación y Deporte para la atención al alumnado en situaciones de acogimiento familiar, residencial o adopción.
Estas iniciativas se completan con la implementación de programas de respiro para las familias que se encargan del acogimiento especializado permanente, de manera que puedan disponer de tiempo de descanso y de ocio; y con el incremento de la formación a las familias y los profesionales. En el caso de las familias, a través del Observatorio de la Infancia en Andalucía y de las Instituciones Colaboradoras de Integración Familiar (Icifs). Por otra parte, se ofrecerá una formación continua a los profesionales y a las entidades colaboradoras a través del Observatorio de la Infancia y se diseñará un módulo formativo específico para los puestos de trabajo en las Delegaciones Territoriales y la Dirección Geneal de Infancia y Conciliación.
Finalmente, se ha señalado la intención del Gobierno andaluz de proponer al Gobierno de la Nación que las familias acogedoras de urgencia o temporales puedan beneficiarse de las medidas de apoyo a las familias numerosas, de las prestaciones de la Seguridad Social por hijo o hija a cargo, de las deducciones en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) por descendiente y maternidad, de la excedencia laboral por cuidado de menores y de la reducción de la jornada laboral.
Al término de 2018, en Andalucía había 3.151 menores en acogimiento familiar. De ellos, 934 se encontraban en acogimiento de urgencia o temporal y 2.217 en permanente. Otros 800 menores permanecían en guarda con fines de adopción y 2.238 en centros de protección. “Aunque estos centros cuentan con profesionales y personal que trabaja para mantener un clima de convivencia afectuoso y acogedor, nuestro objetivo es establecer nuevas estrategias para incrementar el número de familias comprometidas con el acogimiento de menores. El entorno familiar es clave para adquirir el vínculo afectivo necesario para el desarrollo emocional y social en la infancia”, ha concluido la consejera.