Guardia Civil /Guardia Civil
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Los agentes descubrieron un doble fondo en la bandeja que alojaba los altavoces, en su interior había 25 paquetes de cocaína de gran pureza.

La Guardia Civil ha detenido a dos individuos de 46 y 43 años de edad, domiciliados en Barcelona, como presuntos autores de un delito contra la salud pública por tráfico de droga, al descubrir que transportaban 27,5 kilos de cocaína en un turismo por la A-92, el mayor decomiso de cocaína de los llevados a cabo en la provincia de Granada en 2018.

La operación tuvo lugar durante la madrugada del pasado día 14 de septiembre a la altura del kilómetro 264 de la A-92, en el término municipal de Huétor Santillán.

Agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de la Guardia Civil de Granada (USECIC) interceptaron un turismo que circulaba sentido Murcia en el que viajaban dos personas. Identificaron primero al conductor y luego al acompañante y comprobaron que ambos tenían numerosos antecedentes policiales por tráfico de droga, por lo que decidieron registrar el vehículo más a fondo, ya que en un primer momento los agentes no habían observado nada anormal.

La Guardia Civil descubrió que los altavoces del vehículo no sonaban y localizó un interruptor que abría un doble fondo en la bandeja que los alojaba y dentro 25 paquetes que se comprobó, tras ser analizados con el narcotest, contenían cocaína de gran pureza.

Los dos ocupantes del vehículo fueron detenidos y, junto con el vehículo y la droga intervenidos, trasladados hasta la comandancia de Granada para instruir diligencias.

Plan Telos

Esta nueva actuación se enmarca dentro del importante esfuerzo que la 4ª Zona de la Guardia Civil, esta desarrollando contra el tráfico de droga y se incardina dentro del plan Telos. Este plan, que entró en funcionamiento a principios del año 2013, tiene como finalidad combatir de forma integral el tráfico de droga y evitar su posterior distribución en España o en cualquier otro país europeo.

La Guardia Civil está especialmente vigilante en la A-92 y en la A-44 a su paso por la provincia de Granada, ya que las organizaciones que se dedican al tráfico de sustancias estupefacientes utilizan especialmente esas dos vías para mover la droga hacia Levante, Cataluña y resto de Europa.