Una de las casas vandalizadas /Cedida
Una de las casas vandalizadas /Cedida

Los dueños de las once viviendas desalojadas en la urbanización Sport Aljarafe, ubicada sobre una ladera de Tomares (Sevilla) aquejada de deslizamientos de tierra, han denunciado que dos de estas casas han sido objeto de robos y destrozos en su interior y una de ellas incluso ha sido «esporádicamente» ocupada para pernoctar, toda vez que «la mayoría» de los once inmuebles habría sufrido sustracciones en sus patios y jardines.

Una portavoz del colectivo de propietarios ha explicado a Europa Press que los robos y «actos vandálicos» afectan especialmente a una de las viviendas, que habría sido prácticamente «desvalijada» al sufrir el robo de «lámparas, cortinas, grifos y vitrocerámica», toda vez que esta casa habría sido además objeto de destrozos y de ocupaciones «esporádicas» para pernoctar en su interior. «A lo largo del verano, han estado reiteradamente entrando en la vivienda», ha dicho esta persona.

Otra de las viviendas, según ha explicado, habría sido también objeto de robos perpetrados en su interior, siendo sustraídos pequeños efectos como una cafetera pero sin alcanzar la «dantesca» situación que presentaría la primera de las viviendas afectadas por estos allanamientos. Eso sí, según esta mujer, en esta otra vivienda habría efectos «apilados», lo que hace temer que los autores de estos robos planeen sustraer más objetos.

Del mismo modo, esta persona ha expuesto que los jardines y patios de «la mayoría» de las once viviendas desalojadas en 2016 por los deslizamientos de tierra de la ladera sobre la que se asientan han sido también objeto de «robos», saldados con la desaparición de efectos propios de estos espacios, como mesas de jardín o utillaje de barbacoa. «Se han llevado cualquier cosa que tuviese un mínimo de valor», ha lamentado.

Exponiendo que estos robos han sido denunciados ante las autoridades, principalmente ante la Guardia Civil y la Policía Local, esta portavoz del colectivo ha lamentado la «impunidad» con la que actúan los ladrones, atribuyendo al Ayuntamiento de Tomares, gobernado por el popular José Luis Sanz, una «inacción» ante estas situaciones.

Hablamos de la urbanización Sport Aljarafe, construida hace décadas sobre una ladera de Tomares y donde desde abril de 2016, un total de once viviendas han sido desalojadas como consecuencia de las deficiencias arquitectónicas que sufren. Dichos problemas arquitectónicos derivan, precisamente, de los corrimientos de tierra detectados en la ladera donde se asienta la urbanización.

Las medidas propuestas para corregir la situación de la ladera suponen un coste estimado de unos 5,7 millones de euros, toda vez que a finales de 2017, el Ayuntamiento de Tomares anunciaba que sus presupuestos de 2018 contarían con aproximadamente 400.000 euros para «cofinanciar» junto a otras administraciones la primera fase de los trabajos de estabilización del escarpe.

Esta primera fase de los trabajos, precedida de diversos estudios y trabajos técnicos destinados a avanzar en las soluciones a esta situación, está no obstante subordinada a los resultados del dictamen encargado al Instituto Geológico y Minero de España sobre la situación exacta de la ladera, al objeto de estabilizar la misma y permitir el regreso de estas personas a sus viviendas.

En ese sentido, el Ayuntamiento de Tomares ha defendido en no pocas ocasiones la necesidad de que otras administraciones colaboren en el proyecto de estabilización de la ladera, a cuenta de la inversión necesaria para eliminar los riesgos asociados a los deslizamientos de tierra.