Hasta dos empresas de ingeniería y control detectaron “expansividad de las tierras” en la zona del barrio de La Nocla, en Alcalá de Guadaíra, donde se pretende construir el geriátrico para 180 residentes. Las obras comenzarán este verano, asegura el Consistorio.
Sevilla Actualidad. El Ayuntamiento alcalareño seguirá adelante con sus intenciones de construir en la barriada de La Nocla una nueva residencia para 180 residentes a pesar del informe desfavorable de empresas de ingeniería y control, que alertan de que la calidad del terreno es desfavorable.
De esta forma, y según un escrito de la Asociación de vecinos La Nocla remitido a Sevilla Actualidad, la empresa de ingeniería y control Vorsevi ya realizó su estudio sobre el terreno de la explanada situada en el interior del barrio de la Nocla, informando desfavorablemente sobre las calidades del terreno donde se pretende construir la futura residencia de mayores.
Es más, después de recibir el informe, la empresa constructora, decidió desplazar hasta la zona a sus propios técnicos para comprobar “in situ” el estado del terreno. Finalmente y al igual que la empresa Vorsevi, pudieron comprobar las características de expansividad de las tierras.
En esta situación, los vecinos de La Nocla, insisten en recordarle al primer edil alcalareño, el socialista Antonio Gutiérrez Limones, que durante más de una década, cincuenta viviendas sufrieron desperfectos por movimientos del terreno (algunas todavía a la espera de ser reparadas) y no quieren sufrir el riesgo de que por movimientos del terreno durante la construcción del geriátrico, sus casas vuelvan a sufrir daños.
Se construirá sobre más de 5.600 metros cuadrados
Mientras tanto, el Ayuntamiento ya ha avanzado que la obra y gestión de este centro privado, que concertará plazas con la Administración autonómica, han sido adjudicadas al grupo Geriatros, que invertirá algo más de 7 millones de euros en la ejecución.
La parcela sobre la que se va a construir es una extensión municipal de más de 5.600 metros cuadrados que linda con las calles Cáñamo y Zarzas sobre la que se levantará un edificio de tres plantas más sótano con cerca de 10.000 metros cuadrados.
La primera planta estará ocupada por servicios comunes, tales como el vestíbulo, la cafetería, el gimnasio, la sala polivalente, la enfermería, además de la cocina, las oficinas, las salas de terapias, o la zona de actividades cubiertas, teniendo acceso a una zona ajardinada donde se dispondrán juegos al aire libre.
En la primera y segunda planta se dispondrán las 105 habitaciones, de las cuales 30 serán individuales y las restante dobles, teniendo 79 terrazas compartidas donde los residentes pueden hacer vida en común.