En los aparcamientos fantasmas del tranvía en el Zacatín, en Alcalá de Guadaíra, a medio camino del núcleo urbano y los centros comerciales de Cabeza Hermosa, un pequeño coche rojo -de los que se conducen sin carnet- está estacionado desde hace más de un mes. En su interior, de apenas tres metros cuadrados de superficie, vive una familia de cuatro miembros con su mascota, un gato.

Llueve y hace mucho frío. Se registran temperaturas bajo cero durante la madrugada en las últimas semanas. Se calientan con el calor humano y, a veces, con la calefacción del vetusto vehículo que hace las veces de hogar en las condiciones de vida más ínfimas que se pueda imaginar.

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Licenciado en Periodismo. Actualmente en Sevilla Actualidad y La Voz de Alcalá. Antes en Localia TV y El Correo de Andalucía.