La Policía Nacional ha imputado una decena de delitos más al profesor pedófilo de Alcalá de Guadaíra, de 59 años de edad, detenido el pasado 22 de abril, donde se le imputaba inicialmente como presunto autor de al menos tres delitos de abusos sexuales continuados a menores. Tras una investigación, se ha imputado con una decena de delitos más al profesor, por lo que ya son casi quince las adolescentes presuntas víctimas de abuso.

En uno de los casos denunciados no fue únicamente abuso y se cometió una agresión sexual, además, la mujer del profesor también ha sido detenida, ya que se considera cooperadora necesaria para que éste cometiera los delitos. Así, los investigadores creen que es imposible que no se diera cuenta de nada, pues los hechos ocurrían estando ella en la casa. 

El profesor abusaba en su propia casa mientras daba clases

El profesor fue detenido el pasado 22 de abril en su casa de Alcalá de Guadaíra. La investigación comenzó tras la denuncia interpuesta por una joven, que en la actualidad tiene 20 años de edad y que manifestó haber sido víctima de abusos sexuales mientras recibió clases particulares cuando era menor de edad.

La chica sufrió los presuntos abusos sexuales en el periodo comprendido entre los 7 y 14 años de edad. Estos delitos se cometieron durante las clases particulares que el denunciado impartía en un aula anexa a su vivienda.

Según el relato de la joven, en ese periodo de tiempo, el detenido impartía clases particulares de matemáticas y otras asignaturas en su domicilio, aprovechando esta circunstancia para realizar tocamientos en sus partes íntimas mientras realizaban las tareas escolares. En una de las ocasiones, según consta en la declaración de la víctima, el arrestado la llevó a su habitación, donde la tiró sobre la cama e intentó desabrocharse el pantalón para agredirla sexualmente. 

El grupo de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Comisaría de la Policía Nacional de Alcalá de Guadaira realizó las gestiones de investigación y tomó declaraciones a otras tres personas. Dos de ellas son menores de edad, víctimas y testigos de los hechos, mientras que la tercera es mayor de edad, pero que era menor cuando acudía a las clases.

Del resultado de esas primeras investigaciones, se pudo conocer que el presunto autor de los hechos lleva impartiendo clases en su domicilio desde hace más de una década.

El pasado 22 de abril, la Policía detuvo en su casa al presunto autor de los hechos. En el registro de la vivienda, se intervinieron hasta 24 dispositivos informáticos, móviles y de almacenamiento (tipo USB y discos duros) susceptibles de poder almacenar imágenes de los alumnos menores de edad, material que se continúa analizando de manera exhaustiva.

La autoridad judicial lo desterró de Alcalá

El detenido carecía de antecedentes policiales y, tras ponerse disposición de la autoridad judicial, esta decidió su decretó su destierro de la localidad y la prohibición de aproximarse a los menores. 

Los investigadores estaban convencidos, por las circunstancias que rodean al caso, de que existían otros menores víctimas de abusos por parte de este profesor. La Policía continuó las gestiones para localizar a más adolescentes que hayan sufrido estos delitos y emplazarlos en la comisaria de Alcalá de Guadaíra para presentar las correspondientes denuncias. De esta forma, los agentes han conseguido ya reunir a otras 15 víctimas.