El grupo de la oposición, que critica el carácter sancionador del nuevo reglamento y echa en falta el fomento de la convivencia, reclama al equipo de gobierno socialista un nuevo texto que cambie “el sentido inicial de la Ordenanza”. El PSOE habla de un “doble juego” y una “doble moral” en las filas del PP.
Sevilla Actualidad. Los populares alcalareños han mostrado su disconformidad con la nueva Ordenanza Antivandálica presentando hasta 27 alegaciones al texto. Sin embargo, las sugerencias aportadas por la oposición local no han sentado nada bien en el seno del PSOE de Alcalá, que nada más conocer esta propuesta realizada al Pleno ha criticado la actitud del PP en la política municipal.
Para justificar su postura, el Partido Popular alude a que ya el 20 de noviembre de 2008, día en que se aprobó el documento en Pleno, la formación propuso que se dejase sobre la mesa y que se redactase un texto normativo fruto de la participación de todos los grupos políticos y de las asociaciones de vecinos de Alcalá. Ante la negativa del equipo de gobierno socialista, el Grupo Municipal Popular decidió abstenerse en la votación, aunque sí abogó por aprobar una ordenanza de este tipo.
Sin embargo, el portavoz popular, Javier Jiménez, cree que se debería cambiar “el sentido inicial de la Ordenanza, entre otras cosas, para fomentar la convivencia y no tener sólo un carácter represivo y sancionador”. Es por ello que sugieren un total de 27 alegaciones para conseguir este propósito. Unas pautas que, por el momento, no estudiará el gobierno municipal.
“El texto presentado en el Pleno del 20 de noviembre sólo era una copia de la Ordenanza sobre Protección de la Convivencia Ciudadana de Valladolid”, insiste Jiménez, que califica de “lamentable” la normativa porque “debería ser obra de un equipo de trabajo en la que estuvieran presente las principales fuerzas políticas y los agentes sociales más destacados de Alcalá, así como representantes de las distintas fuerzas de seguridad y de los centros educativos de nuestra ciudad. Por ahora”, prosigue el portavoz del PP, “se ha perdido la oportunidad de hacer una ordenanza adaptada a la realidad alcalareña, fruto de la participación ciudadana”.
Un texto más positivo
Las 27 alegaciones presentadas por el grupo Popular están elaboradas a partir de un informe del grupo de trabajo de Asuntos Sociales y Participación Ciudadana del PP de Alcalá. En el documento, entre otras cosas, se asegura que lo importante es que “los actos vandálicos no queden impunes, y que debido al desgobierno de los socialistas alcalareños, existen conductas incívicas tipificadas por otras ordenanzas que no se sancionan en la práctica”.
Entre las propuestas presentadas por el grupo de la oposición destacan las de no limitar la libertad de expresión de los colectivos ciudadanos que no tienen la posibilidad de informar de sus actividades o de expresarse a través de los medios de comunicación; habilitar paneles en los que los sindicatos, partidos políticos y organizaciones sin ánimo de lucro puedan colocar, gratuitamente, sus carteles, boletines o folletos; introducir un capítulo en el que se establezcan medidas para fomentar el civismo entre los ciudadanos y otro en el que se aborde la rehabilitación de los infractores; que no se prohíba a los vecinos regar los árboles; añadir un artículo en el que se prohíba determinadas conductas que atenten contra la dignidad de las personas y otro que proteja a los animales domésticos; reconocer determinadas obligaciones de la Administración Local como habilitar urinarios públicos en las fiestas más importantes; y explicar qué papel tendrá la Policía Local a la hora de hacer efectiva esta Ordenanza con el fin de garantizar su aplicación, entre otras alegaciones.
Además, los populares han incluido dentro de su batería de alegaciones para mejorar la Ordenanza sancionar a los “gorrillas” que ejerzan la mendicidad con coacción; destinar el importe de las multas a mejorar el mobiliario urbano y a impulsar medidas para fomentar conductas cívicas, con el fin, entre otras cosas, de evitar que la Ordenanza sea utilizada con fines meramente recaudatorios; e introducir un artículo sobre la caducidad y prescripción tanto de las infracciones como de las sanciones.
Para lograr redactar un texto de estas características, el propio Javier Jiménez se ha ofrecido a “colaborar en la redacción de una nueva ordenanza, más adaptada a la realidad alcalareña”, y espera que el equipo de gobierno socialista “tenga en cuenta las alegaciones y sugerencias presentadas por el PP por el bien de la ciudad”.
Las alegaciones “del doble juego y la doble moral”
Para el secretario de Organización de los socialistas alcalareños, Francisco García, la presentación de estas 27 alegaciones hace que el PP “vuelva a caer en la demagogia como modo de hacer política”.
García, que critica que la oposición no apoye las iniciativas del Gobierno, considera que Javier Jiménez “cae en la contradicción más absoluta afirmando que quieren cambiar su sentido inicial de la misma para evitar un carácter represivo a la vez que piden que los actos vandálicos no queden impunes”.
El PSOE ve “evidente que al PP lo único que le interesa es el sensacionalismo y acaparar titulares en prensa sin detenerse en la realidad de Alcalá”. Es más, apunta que “de la nota que emite el PP se desprende que desconocen la Ordenanza que pasó por pleno en noviembre y cuya filosofía está basada en fomentar la educación y los buenos hábitos para evitar el vandalismo antes que usar la represión”.
Desde la Secretaría de Organización del PSOE local tachan de “penoso” que “el PP siga usando el doble juego y la doble moral que acostumbra”. “Está claro que, de acuerdo con su habitual estilo demagógico, lo único que le interesa al PP es confundir a la ciudadanía”.